Siguiendo la iniciativa de Mag mi aportación es sobre Lorca y un posible sueño
Federico soñaba, en el vagón del tren que le llevaba a Granada, donde sería apresado y posteriormente asesinado, con su amor imposible.
Un recuerdo imborrable
inundaba sus versos
de piel ardiendo
y caracolas marinas
gimiendo al viento.
Golondrina y testigo,
dejando el cielo,
anidaba en sus brazos
entre sus sueños,
preciado anhelo.
Encendido recuerdo
de unos momentos
cuando dos almas gemelas
echaron el vuelo
desafiando al tiempo.
Lo efímero e imposible
en su sueño devenía
futuro eterno,
ilusión desbocada,
nueva savia de su alegría.
El poeta que soñaba
ir al exilio con él,
despertaba para verse
apresado y luego muerto
de la manera más cruel.