lunes, 3 de septiembre de 2018

Septiembre y las gaviotas


La gaviota otea el horizonte. Sabe que los turistas se acercarán en el barquito, y dejarán, seguramente, restos de comida. Ya saciada el hambre, se dirán entre ellas, "qué molestos son estos humanos", pero al día siguiente les volverán a esperar, con la misma curiosidad, desprecio total y hambre.

Hoy no llegará el barquito con sus ruidos estridentes. Los veraneantes se han ido, y no habrá jarana ni colores correteando, ni fotos para las que posar, ni restos de bocadillo, pero ellas no lo saben. Puede que al anochecer les echen a faltar. Luego se olvidarán de los humanos y volverá la calma a las rocas del faro y a la playa recóndita.


25 comentarios:

  1. De las incomodidades aprovecha lo que puedas.
    Un beso.

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    1. Quien vive en Barcelona tal vez vea el tema como casi propio. Broma. Toda incomodidad pude tener su parte positiva, aunque cueste de creer

      Un beso, Alfred

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  2. Sin embargo, cuando les falta lo que dicen, ellas vuelan al interior y se posan en los campos abonados de estiércol para buscar allí, la comida y es un bonito espectáculo ver las gaviotas, las vacas, las garcetas, en un "pequeña procesión" sobre el manto verde de la tierra.
    Un abrazo y feliz semana.

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    1. Sí, yo he quedado impresionada de los kilómetros que llegan a ir tierra adentro.. Son animales que pueden comer casi de todo, así que, por supervivencia, se alejan del mar lo que neecsitan, formando escenas curiosas.

      Un abrazo y feliz martes

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  3. O por el contrario han oído hablar de la majestuosidad de sus vuelos y en vez de ir a una escuela da danza, piensan en un conservatorio de canto, para mejorar sus sonidos.
    Que no solo de migajas y detritus vive el ave.
    Besos.

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    1. jaja, muy bueno. Ellas, con sus graznidos,desentonan un poco cuando se las ve volar con tanta elegancia. Nosotros podemos ser ruidosos, eso es seguro, pero podemos acompañar la presencia de música suave y acunadora. Si entonasen al menos...pero qué feo cantan las pobres.

      Un abrazo, Juan, feliz martes

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  4. No hay mal que por bien no venga… Los humanos somos muy ruidosos (unos más que otros) pero en el fondo, ambas especies nos complementamos, o así debería ser…
    Bella foto!

    Yo regreso de mis días vacacionales, y vengo a dejarte un abrazo grande, querida amiga! 😘

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    1. La naturaleza a veces se equivocan y para mí hay un exceso de gaviotas, pero bien mirado, lo que hay es un exceso, invasor muchas veces, de humanos. Me alegro que hayas gozado de las vacaciones. Ahora hay estudios que demuestran que hacer vacaciones de mínimo tres semanas mejora la salud más que adoptar hábitos saludables, ya ves lo importante que es desconectar , bienvenida.

      Un abrazo grande, Ginebra

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  5. Van a necesitar un psiquiatra de gaviotas...

    Besos.

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    1. Están con el corazón "partío" las pobres. Imagino que al principio están sorprendidas de ver tanta gente en las playas, pero luego se acostumbran, así que igual andan haciendo canciones o poemas de añoranza cuando al fin acaba el verano ;.)

      Un beso, Toro

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  6. El texto es muy bonito, la pena que las gaviotas son aves carroñeras. Donde ven más porquería más disfrutan.

    Besos.

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    1. Tan bonitas que son, y son como las ratas de mar las pobres. Sin embargo verlas volar es siempre muy apetecible y relajante.

      Besos, Rafa. Feliz martes

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  7. Todo tiene dos caras, estan tranquilas pero no pueden jugar a coger comida. Como la vida misma a poquito que reflexionemos sobre tu entrada. Abrazos

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    1. Casi todo tiene su cara A y su cara B, lo que pasa es que siempre queremos ver la cara B de los inconvenientes.

      Un abrazo y feliz martes

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  8. A las gaviotas les pasa un poco como a las palomas, que están perdiendo prestigio entre los humanos.
    Un abrazo.

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    1. Es que están muy pesadas. Las palomas para mí que son muchas. No sé el censo de las diversas ciudades pero desde mi punto de vistas son muchas, si se comieran los mosquitos les vería mayor utilidad, pero feas y que vemos inútiles, salvo las mensajeras, pues no sé, cada día me gustan menos, pobrecillas.

      Un abrazo

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  9. Creo que debemos parecerle molestos también a muchas otras especies...
    Qué bonito texto :)

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    1. Sin duda. Pienso en las moscas y deben estar hartas de palmadas perseguidoras, por ejemplo. También pienso en safaris, fotográficos ya, y creo que prohibidos de caza. Los animales de la sabana africana debe ver los jeeps cargados de turistas como algo raro. Los masais, ahora que lo pienso, se han adaptado bien a la invasión de los turistas y saben sacra la ventaja de los inconvenientes. Al final hemos de convivir, somos parte de la naturaleza.

      Un abrazo, Silvia, y feliz martes

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  10. Somos el animal más inteligente pero parecemos los más idiotas. No conseguimos entender que el planeta que ensuciamos es el ´nico que tenemos, es nuestra casa. Ahora en las playas podemos ser limpios, por papeleras selectivas, pero cada mañana temprano pasan un rastrillo por la arena y siguen sacando porquería. No lo entiendo.

    Un abrazo y feliz martes

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  11. Me encanta, me has hecho recordar este verano... Me despertaban ellas, siempre, llevaban mucho jaleo.

    Son preciosas.

    Muchos besos, Albada.

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    1. Son ruidosas, jaraneras, alborozadas y divertidas a ratos. Pernoctar cerca del mar tiene esa ventaja y ese inconveniente :-)

      Un abrazo grande, Sakkarah

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  12. Hola Albada Dos , una manera muy didáctica de contar el pensamiento de una gaviota , que es cierto al 100% , para mi que es un animal molesto por los ruidos que hacen , me a gustado tu relato , te deseo una feliz tarde besos de flor.

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    1. Son ruidosas, pero verlas volar es un gozo para la vista. No podemos saber qué piensan, pero creo que nos miran con desprecio para dar buena cuenta luego de los restos que dejamos en las playas.

      Un abrazo y feliz jueves

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  13. Pobres... pero son muy listas y capaces de volar a parajes donde los turistas las miran embobados. Les roban hasta las bolsas de patatas fritas.
    Cuando chillan parecen niños saliendo de clase.
    Gracias por tu visita.

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    1. Ese bullicio tan suyo y de las salidas escolares, me parecen, como a ti, sonidos parecidos de excitación y jolgorio.

      Un abrazo grande

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Ponen un gramo de humanidad. Gracias por leer.