El perfil de chico rubio y jovial le había cautivado.
Por el nombre no podía reconocerle, pero era amigo de dos amigas suyas, así que
aceptó la solicitud de amistad de Miguel Castellar, de dieciséis años. Cuando
un señor de barba y chándal le cerró el paso en aquel portal, la inexperiencia
le hizo pensar que era una confusión. El simpático chaval debía estar en el
primer piso, bastaría gritar su nombre. El tipo reaccionó rápido. Con un brazo sujetaba su cuerpo. Con una mano apretaba su cara con una especie de trapo, mientras la empujaba contra una pared
Al sentir
esa cosa dura sobre su vientre, a través del tejano, el instinto le
advirtió del peligro. Sus gritos no se
oyeron. Esa gasa que olía a aguarrás no
la dejaba respirar, y pensó en una mosca atrapada en una red de araña. La
cremallera del pantalón no evitó que pusiera sacárselo a tirones. Luego notó que algo hería su vagina, mientras una zarpa retiraba la tela de su suéter. Un dolor sordo se instauró en su conciencia. Lo
siguiente que recordaba era saberse helada, semi desnuda y sucia. Su móvil
había desaparecido. La señora que iba a cuidar al anciano por las noches la había encontrado, llorando, encogida, asustada. Se había portado maravillosamente con ella. No lograron dar con el tipo. Los engranajes funcionaron correctamente. Médico,psicólogo, familia y policía científica la arroparon.
Pasaron dos años. La chica que no volvería a sonreír recibió una solicitud de amistad. Era de un compañero de clase. En un arranque de memoria tomó el smartphone y lo estrelló contra la pared del instituto.
Los inconvenientes de las redes sociales. No sabemos quién está realmente detrás de un perfil. Todo puede ser falso, incluso una foto puede ser un señuelo para que caigamos en el engaño. Estamos indefensos ante cualquier desaprensivo. O nos roban la identidad o la integridad.
ResponderEliminarUn relato desgarrador por el realismo que contiene.
Un abrazo.
Es verdad, estamos indefensos. Da igual que sean cincuenta millones de usuarios cuyas líneas de facebook han sido invadidas, ni los datos que siguen pasándose de red a red, de tal manera que te sugiere propaganda en función de tus preferencias, es que en verdad el internet nos ha abierto un mundo infinito, y ahí caben embaucador y mala gente de toda calaña.
EliminarUn relato basado en una historia real. La chica se suicidó. Un abrazo
Tan triste...
EliminarUn relato estremecedor, cuanto miedo dan las redes sociales, por mas que se les avisa a los jóvenes, siempre hay peligro nunca hay que bajar la guardia y repetir las consignas. Un abrazo
ResponderEliminarNo hay que la prevención y la prudencia. Porque tras nick puede haber un monstruo. Yo puedo ser Albada, de mediana edad, como puedo ser Pepe, viejo verde, por qué no. Es broma. El anonimato, teórico, porque nuestra IP remite al DNI y ubicación, nos permite entrar en redes sociales pudiendo ser quien queramos representar que somos
EliminarUn abrazo
También los no tan jóvenes pueden caer :/
EliminarLos adultos podemos caer igualmente, porque no sabes si esa persona con la que crees estar hablando es ella o no. Un abrazo
EliminarPerfectamente narrado y, por desgracia, posible realidad en esta sociedad en que vivimos.
ResponderEliminarUn abrazo.
En este caso está inspirado en una historia real con final suicida. Imaginé el cómo, pero poco más.
EliminarUn abrazo
Desgraciadamente realista. No dejo de repetirle a mi nieta más joven del peligro que entraña ese desmesurado escaparate que existe en un smartphone.
ResponderEliminarBesos.
Es un universo, el internet en el bolsillo, las redes sociales con ubicación, todo puede ser una enorme red donde caer. Respeto sí, miedo no, porque es su universo. Esto es un caso extremo, pero el bullyng se hace a través de redes, con una frecuencia que nos sorprendería, con consecuencias nefastas, con resultado suicida en muchas ocasiones.
EliminarEste caso menos que la punta de un iceberg. Disfruta de tu nieta, vive la exultante juventud que desprenderá sin duda. Un abrazo
Cruda realidad. Hay que estar siempre avizor por una falta de cultuta y eduación galopante.
ResponderEliminarUn beso.
hay falta de cultura y falta de experiencia. La realidad es que las relaciones virtuales están sustituyendo a las reales, sin aromas de café, sin lluvia si es día es lluvioso, sin incómodas sillas o miradas al viento.
EliminarUn beso
Jo... qué fuerte y me temo que por desgracia muy de actualidad.
ResponderEliminarBesos.
Es fuerte sí. Las redes de pescadores son mucho menos peligrosas, parece.
EliminarUn beso
Tremendo episodio. Nosotros pudimos tener conexión a la Red cuando nuestra hija tenía 12, casi 13 años. Y como a toda adolescente le gustaba chatear.Y chateaba, si, estando yo sentada a su lado leyendo cuanto entraba y cuanto salía Y como el servicio de la Red era en base a una tarjeta muy básica, no pasábamos de 45 minutos a una hora por día. Desde mi punto de vista, los padres debemos estar muy atentos siempre y hablar mucho con las crías.Saludos cordiales.
ResponderEliminarHoy en día la red la llevan en el móvil, en su bolsillo de pantalón. Eso dificulta mucho el control. Sin educación para un uso correcto, es peligrosa, por eso, como dices, es tan importante estar cerca, en lo posibles, y sin alarmar, crear conciencia de los peligros
EliminarUn abrazo, Beatriz
Hola Alba , un relato muy duro pero muy real , la verdad es que con la red nunca sabes con quién chapas en realidad .
ResponderEliminarMe a gustado mucho tú relato.
Besos de incitó de semana besos de flor .
En realidad las redes son la apertura de fronteras. ES tan importante el uso de internet, que tras la rueda, y por supuesto el fuego, creo que condicionará un antes y un después en la evolución. Tiene riesgos, de eso estoy segura porque hay incontables ejemplos, pero la red es un invento de mejora, sin dudarlo.
EliminarUn abrazo y feliz semana
ResponderEliminarSiento en tu mirada ese calor de mi cuerpo que antes me hacía estallar en escalofríos de pasión y ahora son de miedo. No sé muy bien si es recuerdo de tu amor o de odio...miedo a la soledad o a esa mirada que tienes tan fría y despreciable. Todos los males que me hiciste pasar los he pagado con mis lágrimas y de alguna manera, mi vida se ha esfumado en cada una. Aún guardo en mí aquellos momentos en que fuí feliz contigo, pero chocan con la persona que eres ahora. Mi alma la convertiste en pedazos que poco a poco voy recomponiendo; un puzzle en donde cada pieza tiene un mal sabor de boca...y ya estoy cansada de levar tu cruz. No sabes que significado tiene para tí el respeto a una mujer y tampoco sabes lo maravilloso que eras cuando en tu forma natural, me hacías sentir la mujer más afortunada. Mi vida se ha quedado en nada.
Hoy vivo tranquila sin saber muy bien que camino debo escoger pero necesito tomar una decisión y aún no se si estoy preparada. Me recuerdo cuando estaba llena de sueños y esperando de la vida cada fruto pero, sólo tengo vacios que se me clavan como alfileres. Han pasado días y años esperando verte cambiar. Sigo sin saber que hacer y miro la carita de nuestro hijo y no sé bién pero Dios me da fuerzas por darle un futuro que no sea igual que el mío...Ahora llega el momento de irme. Me voy con mis padres; a la cuna de un hermoso recuerdo para que mi niño crezca con el amor que tú no sabes dar. Me voy con mis padres y a tí nunca te volveré a ver...jamás te acerques a nosotros.
- Ella abre la puerta con su hijo de la mano. Tiene miedo a lo que pueda suceder en ese momento y en toda la calle, se escucha un disparo de escopeta...
Recuerdo otro caso.
EliminarEl problema fueron las nenas. No podía negarle el derecho a tenerlas los fines de semana alternos. Con el segundo parte de lesiones no tuvo más remedio que explicar a su madre la situación. Era un divorcio que se veía venir, pero nunca había explicado detalles de su vida marital. Amigas ya hacía tiempo que no tenía. Borraba todos los wasap, lo que había contribuido a más paranoias por parte de Lucas, pero es que no conseguía aceptar su necesidad de controlarla. El resto es historia. Los mensajes, que no borraba, amenazando con vengarse, eran continuos. La primera vez que la amenaza no fue “voy a matarte, zorra” y lindezas así, se quedó helada, le decía que la haría pagar con lo que más quería. La jueza no consideró esas bravuconadas más peligrosas que las previas.
Pero eso ahora ya es historia. Los pequeños cadáveres yacen en sendas camillas del departamento de autopsias. Y sí, la ha doblegado. Lucas ha ganado la partida. La ha herido donde ningún cirujano podrá intervenir para curarla jamás. La ha matado dejándola viva.
Las redes, no sólo de internet, pueden atraparnos, con consecuencias nefastas. Gracias por tu lectura y tu texto. Un abrazo
Geacias a ti
EliminarLa ingenuidad. No exclusiva de los jóvenes, si bien por lógica es más extendida. La ingenuidad del que dice quien es, de quien habla es él mismo, no calibra que le interlocutor puede ser una gran farsa.
ResponderEliminarImpotencia y rabia a raudales. Un abrazo
Qué gentuza por favor, qué tristeza...
ResponderEliminarUn beso grande.
La ingenuidad se ha dado siempre, y que se aprovecha de ella, también. Lo que pasa es que ahora no es necesario el cara cara porque las redes sociales y los amigos imaginarios, ahora son virtuales, y acaban teniendo poder sobre el crédulo.
EliminarUn abrazote
Qué fuerte. Qué pena que las redes de Internet sean el paraíso de los depredadores sexuales.
ResponderEliminarLa realidad es terrible. Tremendo caso el de tu narración. Muy bien escrito, como todo lo tuyo.
Un abrazo grande
Es un caso extremo, pero el anonimato de la red sí favorece la depredación. Gracias, Ana
EliminarUn abrazo y feliz día