jueves, 31 de enero de 2019

Cocinillas, para un jueves

Tomado de Google

Siguiendo una iniciativa de la bitácora, relato juevero, propongo una "crema de calabaza con pétalos de rosa", por supuesto, inexistente.

Mientras dormías aún, recogí del congelador los pétalos de aquellas rosas que me regalaste por mi cumpleaños. Salí luego al huerto y corté con alicates de dulzura dos hojas de calabaza rociadas por el hielo de este invierno en los paisajes y de esta primavera en flor de nuestros brazos.

Me esmeré en cortar en dados diminutos los pétalos y pistilos, dejé reposar el caldo de virutas de cuerno de unicornio y cabellos de cronopios, y ahora hago un sofrito de besos y copos de nieve, a fuego de levísima ignición, para que la base del caldo deje ir las propiedades y vitaminas de cada componente del desayuno.

Cuando, más tarde, me alzas en tus brazos, crujen las maderas con tus termitas derrotadas, se desbordan los aromas entre las paredes de azulejos de trencadís, y nuestro querido Dog mueve la cola, avisando que el hervor está punto de producir una inundación de besos por toda la cocina. 

El desayuno de amor invernal, entre cremas de vegetales henchidos de amor, nos lleva a apagar el fuego de los fogones, abriendo las espitas de nuestros corazones, sedientos de piel y olas en busca de un suave aterrizaje, que lama la playa de nuestros deseos cumplidos.





viernes, 25 de enero de 2019

Viernes en sintonía IX

Imagen de Ester
Siguiendo una iniciativa de Ester

Casas rodantes
Fuera del sistema
Casas cual caracoles
Los vagamundos

Para día 25 de Enero 2019. Imagen tomada en Octubre del año pasado, en Miami Playa, zona costera de Montroig de Camp. La única oficina bancaria, lucía así de adornada con esa pareja de vagabundos, quienes llevan una bici verde el uno, y una bici-carro el otro.  Me apareció una alegoría visual que captó mi atención.

Hoy debería ser el último post de esta iniciativa auspiciada por Ester. Creo que ha hecho que nos conozcamos mejor. Por las imágenes que hemos compartido, que imagino que han dejado entrever un poco sobre nosotros mismos. Gracias Ester. Gracias a quienes se han asomado a mis imágenes. 

jueves, 24 de enero de 2019

Jueveando, con quesos en esta ocasión.

Imagen de  Dorotea

Siguiendo una iniciativa de Dorotea, esta es mi aportación 

Los queseros

Luis, con sus sesenta abriles a la espalda, tenía  a los quesos como plato favorito. Todos le gustaban, y a todos les encontraba su encanto. Recordaría siempre un queso totalmente hecho con leche de cabra, en un pueblo de Extremadura, de paladar tan rotundo que el pan con el que se acompañaba  apenas disminuía le fuerte sabor. La huerta había añadido unos tomates de formas extrañas pero con un sabor que sí combinaba con ese aperitivo que no permitió una comida completa. 

Ahora, el agente de aduanas le había hecho abrir la maleta. El fragmento de gorgonzola, tan bien envuelto en doble papel de aluminio y metido en una bolsa de cierre hermético, emitía un leve aroma a queso fermentado. Sus vacaciones en Milán y alrededores le había hecho engordar cinco quilos, pero los caprichos gastronómicos bien valían unas sesiones de gimnasio posteriores. Se despidió del queso oloroso con todo el pesar de su corazón, pero ya se resarciría cuando  fuera a Islandia. Había contratado el viaje para ver las auroras boreales, pero entre las actividades, se había apuntado a una degustación de quesos,  de reciente historia, pero muy especiales de sabor, por el tipo de ovejas de tales latitudes.


Al entrar en el avión se descalzó. Los pasajeros miraban,  disimuladamente.  Las dos bolsitas de los bolsillos de su cazadora habían pasado el control. Por si acaso, se había guardado un as en la maga, para el próximo risotto en Barcelona.

De Google


Curiosidades culinarias de Islandia

martes, 22 de enero de 2019

Encadenado con Alfred 6

Tomado de Google


P. Oteando la acera de la Mona Lisa te vi, con El País en la mano, revisando un par de veces el reloj. Observé tus llamadas al móvil, para ver cómo te sentabas al fin, asumiendo que ella no acudiría. Ese teléfono había sido dado de baja, porque los amores valientes, a veces, acaban así.

A. Llamadas perdidas, que llenan un vacío entre dos seres, que no se encontraron cuando se perdieron y que al intentar descubrirse, las aguas del olvido se les llevaron por delante.

P.  Las aguas del olvido se remansaron en Andorra, ante un fuego cálido entre exceso de nieve, exceso de ocupaciones, exceso de prejuicios, exceso de sinsabores, para retomar la calma de los latidos acompasados a los besos, de un pasado posible por construir desde el ahora. 

ACon tantos excesos, no era extraño que sus latidos se aceleraran más de lo permitido, al compás de los besos prometidos.

PPromesas de tierra y lunas, besos de aire y sueños. Compases de un vals de ida sin vuelta hacia lugares donde descalzar los silencios. Para llenarlos de miradas, y de deseos.

AEl frío invierno, no hacía sino atemperar el fuego, que su pasión hacía crecer en unos cuerpos enfebrecidos, llevados por el compás de un vals, a un zenit de convulsa satisfacción.

PLa dama que tanto tardó en llegar estaba en la antesala de los sueños de la pasión con gabardina, y los aperitivos de gambas, de besos furtivos vestidos para la ocasión. El hombre de tibia mirada se quemaba antes de que la parrilla estuviera en el asador de los aromas de té y amor.

A.  Nada le hacía esperar tan alto reconocimiento por la parte contratante de un cantar alegre y furtivo que amenizaba su espera con acordeón y pasodoble, mientras las miradas iniciaban una y otra vez un fuego incendiario que sólo quemaba sus almas encadenadas.

PA unos mangos y cucharas en la cocina de los deseos por preparar, entre fogones sin fuego que empezaban a demandar ser encendidos, con el fuego de la amistad. Pasaría el tiempo y los ingredientes hallarían sus sitios, pautas, poesías, para hacer una ensalada de besos y sin mantel

ALos manteles se los pusieron de capas, los escurridores de cascos, y con los rodillos de amasar, marcaban su autoridad. No hay mejor juego que el que se inicia improvisando y acaba con reglas por estrenar.

PEntre utensilios de cocina que se aviene a jugar con las manos de los sueños, con la tinta de calamar, o con los ojos de los peces que no supieron amar

AMil mensajes escritos, conformando un poema de amor, que los pobres peces, incapaces de recordar, contemplan en el fondo de un paella, donde se ha guisado una canción llena de esperanza.

PCon las patas de las gambas, los bigotes de los peces, las alas de un pollo artrítico y dos huevos de faisán. La cocina sin hebillas ni botones por desabrochar, espera impaciente el día en que empiecen a gozar de los cazos por sartenes, con una pizca de sal.

AAsí, desnudos frente al guiso, con sus cuerpos en permanente estado de alerta, contemplan su creación, esperando el punto justo de cocción, en los granos muestran su individualidad, estando unidos apasionadamente.

PEn un mar de sal marina, bajo las luces divinas de unos neones muy torpes, que dejaron a oscuras la caja de provisiones, dejando que la penumbra permitiera el acomodo de dos sombras lunares que se dieron un antojo. ¡La bombonera quedó temblando ante tan sonoro asalto a oscuras!

ALa coctelera, nunca había sido agitada con tanta pasión, la masa de harina, no se convirtió en pastel, pero sí en un buen acomodo, como fino colchón, para arrumacos incontrolados y descubrimientos de sueños compartidos.

PDe peces de colores conocidos, del uno a otro confín,  aunque la luna rielaba, la noche era fría y esquiva de luna clara, así que colorín colorado, que el pastel por hoy se ha acabado, que Morfeo anda presto en sujetarme en sus brazos. Bona nit. 

ALos cuerpos sudorosos y exhaustos, a punto de rebozado, envidia de los calamares a la romana, ceden sus fuerzas al abrazo de Morfeo, que sigilosamente se los lleva, siguiendo la senda que la luna ilumina. Telón




El encadenado, febrero 2015  


viernes, 18 de enero de 2019

Viernes en sinfonía VIII



Siguiendo una iniciativa de Ester, para viernes 18 de Enero, comparto una foto


Atardeceres
Infancia por sus playas
mar con palmeras 

La imagen está tomada ayer, en Comarruga, barrio marítimo de El Vendrell, Tarragona, que rotulan Coma-ruga desde hace unos años. Allí he veraneado desde los trece años, despidiendo infancia, apurando juegos, despertando a la juventud.  Mucho más tarde, compartiendo playa con mis hijos, pasé a ser la espectadora de juegos parecidos, esos de agua y quemaduras solares, de arena que acaba por todo el suelo del apartamento, de libertad del verano en las playas  sin turismo. Comarruga

miércoles, 16 de enero de 2019

Collage para un Jueves

Collage temático de Neogenesis

Siguiendo una propuesta de NEOGENESIS  para los relatos de los jueves, me he animado para armar este texto.

Me he encontrado a mi viejo amigo Luis, siempre enredado entre minutos y engranajes en el viejo local que inaugurara su abuelo, intentando desentrañar los misterios que se esconden tras los segundos que se esfuman y que nunca vuelven. 

Cuando me ha visto de reojo, no ha podido evitar mirar su reloj de bolsillo y comprobar el de la torre de la Iglesia, que se precia de ser más exacto que el Big Ben. Me alegra la mañana tener la conciencia de que mi propio reloj está engrasado,  y que desayunaré, en el mismo café, construido sobre las ruinas romanas de mi querida Tarragona, el café con leche de siempre, mientras espero que aparezcas, con tu aire de despiste, como aquella primera vez, hace ya tanto tiempo. Aquella mañana, burlando las reglas del azar, que insistía en huelgas de trenes, citas médicas ineludibles y hasta una gripe indómita de aquel invierno de antaño, pudimos iniciar una historia inacabable, ante la estatua del Pegaso. Los viajes que hicimos juntos no bastaron para llevarnos a ninguna parte donde atesorar abrazos, pero seguimos sin guardar la brújula de los grandes romances. tal y como nos prometimos, así que hoy, tal vez ese mismo azar, haga que pasees por esta plaza, y que se detenga mi mirada en un hombre, cuya cara me resulte familiar.

viernes, 11 de enero de 2019

Viernes en sinfonía VII



Siguiendo una propuesta de Ester. Viernes en sintonía hasta Enero
Mi propuesta para  el 11 de Enero 2019


Egipto era mi sueño postergado. Mi viaje acariciado. Mi deseo prohibido. Con la primavera árabe los preciso bajaron, y pude hacer realidad mis anhelos desde los doce años, cuando me prometí visitar el país de las momias y las pirámides, los misterios y las creencias de una cultura milenaria ya perdida.

La imagen es de abrí de 2018, de un viaje guiado y tan programado que me podía permitir el lujo de no pensar ni qué iba a comer. Por supuesto será mucho más bonito y pleno hacerlo al ritmo y gusto de cada uno, pero con mi condición física actual, era y es la mejor opción.

jueves, 10 de enero de 2019

Deseos para un jueves

Imagen de la red


Me uno a Moli en su reto juevero. Cambiar de calendario puede ser buen momento para hacer balances y hacer una lista de objetivos para el año que estrenamos. Los míos.


Deseo volver a la playa. Pisar su arena suave. Mirar al mar y sentir que el horizonte ante mi vista es mi horizonte.
Deseo, una vez más, sentir tus brazos. Notar en mi piel tu trémula piel de terciopelo. Notar tu aliento en un crescendo.
Deseo, aunque sea por otra única vez, viajar contigo. Pisar nuevas calles y oler nuevos aromas. Recrear mi mirada en otros lugares, de tu mano amiga, con tu risa cerca.
Deseo, para este año, que cada día me acerque un poco más a lo importante, y me permita alejarme de lo superfluo, y de sus lastres.

domingo, 6 de enero de 2019

Muchacha triste

Tomo el relevo a Alfred
Imagen tomada de la red
Este dibujo lo están cerrando en Facebook, y se ha de reproducir tanto como se pueda, para denunciarlo, y es un dibujo

Miedo en la cara. Llanto en los ojos. Impotencia en la mirada. No importa cómo llamemos a las muertas a manos de su pareja o ex-pareja. El promedio es de una por semana. Muchas de ellas sin haber puesto demandas previas de maltrato. Lo llamen como lo llamen ya hay una víctima de violencia doméstica ¿?, por celos, y era una mujer, qué casualidad.  Ayer comentábamos en mi casa, en la sobremesa, el por qué las mujeres no denuncian el maltrato, o lo hacen poco, visto lo visto. Bueno, imagino que porque han de volver a su casa, al lado del tipo, lo que no haría más que enfadar al susodicho. 

En la calle seguimos en la misma historia de siempre, mujer sola y de noche, algo  estará buscando. Sí, tal vez tomar el aire, o ir a trabajar, por poner un ejemplo. La ley no está hecha por mujeres, y se nota. Mis deseos de que en un futuro cercano no tengamos que educar a las niñas para que se protejan, porque la mentalidad de los hombres haya cambiado. No se puede generalizar, por supuesto, porque hay hombres, cada día más, que  abogan por la igualdad de trato y sobre todo, de respetar la igualdad de derechos, pero a día de hoy seguimos sufriendo ese mundo machista y esa justicia patriarcal. Basta ya 

viernes, 4 de enero de 2019

Viernes en sintonía VI


Siguiendo una propuesta de Ester. Viernes en sintonía hasta Enero
Mi propuesta para  el 4 de Enero 2019


Un pueblo, aún pesquero, de la costa Dorada. Esta población tiene mucho encanto, y una playa que llega hasta Salou. Este rotonda me parce siempre bella, porque evoca a los veleros, al aire sobre las telas y a la libertad del mar

Que la entrada de año haya sido suave y plácida, con la gente que amamos, con los deseos encaminados a su logro. Feliz año nuevo