Como propósitos de año nuevo, Ginebra, en su blog Varietés, propone sumarse en alguna de tres opciones. La de algo que hacer me pareció muy buena idea
Era lo mejor, abrir la puerta,
calzarse al niño que permitió habitar en su corazón, y con un cazamariposas,
intentar conquistar y retener la ilusión.
Caminaba confiado, con un gorro
similar a uno de su infancia, con botas de no resbalar y la mirada puesta en el
sendero. Éste se abría hasta un riachuelo, que cruzaría por un tronco que algún
caminante pusiera previamente. Se sentó en él, dejando los pies colgando, lo
que le recordó a una tarde de primavera, como ahora, con quince años y
enamorado del lunar de una mejilla. La de Eva Domínguez Alcántara, compañera de
clase, quien acabado el curso se fue con su familia a una ciudad de difícil
pronunciación, Puigcerdà.
Con su móvil, buscó ese nombre.
Estaba en Facebook. Le pidió amistad creyendo muy poco en estas redes sociales.
Llegó la tarde, merendó el bocata que llevara, y cuál sería su sorpresa al ver
que ella, Eva, le aceptaba, con un mensaje cálido y la propuesta de poder verse
cuando fuera posible.
En casa, con la ilusión prendida
en una tela de cazamariposas, se dispuso a dormir, deseando soñar con esa niña,
la única que de verdad le robó el corazón.
Efectivamente, ha sido una buena elección porque me has brindado la posibilidad de disfrutar de tus letras y, de paso, sonreir con una cierta nostalgia al recordar algo parecido.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es que casi todos hemso stado detrás de un lunar en una mejilla, me parece :-)
EliminarUn abrazo
Nunca es tarde si la dicha es buena.
ResponderEliminarBesos.
Claro, si llega, bienvenida.
EliminarUn beso
Tierno relato. Ojalá no les pase como a la Penélope de Serrat, cuando por fin regresó el caminante, y puedan superar el paso del tiempo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues sí, esa Penélope de Serrat quedó en la estación, enajenada.
EliminarUn abrazo, y feliz tarde
Un relato amable con posibilidad de sentirse protagonista. Ginebra siempre genial en sus propuestas y tu en tus aportes. Un abrazo
ResponderEliminarEs estupenda, eso seguro.
EliminarUn abrazo, Ester
Un caminar hacia atrás, como volver hacia ese momento donde la inocencia y las ganas permitían todo. Lo que se hizo por lo que no se haga... y lo ha hecho... y quién sabe, el primer paso ya está dado.
ResponderEliminarUn relato sencillo, cálido, bucólico... Precioso, ciertamente.
Un beso.
Veremos en qué queda, pero la ilusión sí la recuperó :-)
EliminarUn abrazo grande
Qué bonito relato.
ResponderEliminarEnhorabuena.
Besos.
Gracias, la esperanza puede estar al otro lado de una línea de internet.
EliminarUn abrazo
Muy tierno... Gracias.
ResponderEliminarUn abrazo.
A ti, por la lectura. Un abrazo
EliminarQué bonito. Siempre es emocionante volver a encontrarse con gente de la infancia.
ResponderEliminarUn beso muy grande
Sobre todo si era ese amor de juventud, es verdad.
EliminarUn abrazo
Una bella historia felizmente contada!
ResponderEliminar=)
Gracias, era muy tentador que acabara bien.
EliminarUn abrazo
Buenos días amiga, que historia más bella, estoy segura de que a nuestra amiga Ginebra le encantará, te deseo una feliz mañana y mejor fin de, besos para ti y Ginebra, besos de flor.
ResponderEliminarPd, Me a dicho un pajarito que andas buscando un superhéroe para participar en el reto del tintero de oro, yo te puedo sugerir unos cuantos luego tu haces lo que quieras vale, ya que no te los voy a cobrar.
1 La Betty boop.
2 Popeye y Olivia
3 Ignacio y la gata loca (estos son unos dibujos en blanco y negro salían en un periódico de Estados Unidos el primero en salir fue Enel año 1913, hasta 1944 y luego los pasaron por la TV en España llegaron en el año 1973, era la historia de una gata que está enamorada de un ratón) lo puedes buscar en Google, seguro que te gusta ya que eran muy divertidos.
Espero ayudarte con la recomendación, yo también participó en el reto del tintero de oro, besitos y feliz fin de, besos de flor.
Pues son ideas geniales, me decanté por Sancho Panza, ya ves qué tontuna :-)
EliminarUn abrazo, y muchas gracias, guapa
Su participación es simplemente brillante. Foto y texto magistrales.
ResponderEliminar.
Feliz fin de semana... Saludos poéticos
.
Crementos poéticos y ensoñaciones
.
Gracias, me alegro que te gusten.
EliminarUn abrazo
Tierna y ensoñadora historia. Ay, de esos amores del pasado, son tatuajes indelebles del alma. Precioso, Albada.
ResponderEliminarMil besitos para ti ❤️
Son así, tatuados, y uno tiende a recuperar ese ayer.
EliminarUn abrazo, y feliz tarde
Ojalá todos, en según qué circunstancias, observásemos el mundo a través de esa mirada de la niñez…
ResponderEliminarUna historia fresca y evocadora, y, como no podía ser menos, con la ternura que destila aquello que se viste de niñez y mariposas en el estómago…
Me ha encantado, querida amiga. Un placer contar con tu bella participación.
Abrazo grande, y muy feliz tarde! 💙
Es posible. La mirada de la infancia no deberíamos dejarla morir, pero somos necios, me temo.
EliminarUn abrazo grande, y por una tarde de lujo
Los corazones infantiles estaban y están tan distantes de lo que hemos acabado siendo de mayores. Claro que algún germen de lo que después hemos acabado siendo ya habría entonces. No sé.
ResponderEliminarCreo que el germen estaba desde la infancia, si bien en la adolescencoa se perfilan mejor los temperamentos.
EliminarUn abrazo
Esos son los mejores amores, los más ensoñadores, los que nos hacen ilusionarnos y enceguecernos. Bonito relato.
ResponderEliminarUn beso dulce y dulce fin de semana.
Son blancos, muy blancos, por eso leosañoramos. Pero allí estuvimos,´allí sentimos, y allí queremos volver.
EliminarUn abrazo
¡Qué tierno relato!...
ResponderEliminarEse sueño mantendrá su ilusión...
Un abrazo
Mientas dure, si sueña. Igual luego la tiparraca es una borde :-). Es broma.
EliminarUn abrazo
Qué buenos momentos nos ofrece la vida desde la nostalgia y la memoria. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarYa lo creo, recordar es seguir vivindo esos instantes, en parte.
EliminarUn abrazo, y gracias
qué bonita historia! me encantan esos reencuentros. yo también he buscado en las redes a chicas especiales del pasado...
ResponderEliminara ver si se me ocurre algo para el proyecto de ginebra.
abrazos!!
Si las encontraste, que vaya bien. Pues anímate, seguro que le gustará.
EliminarUn abrazo
Muy buen relato. Se entiende muy bien. Un abrazo.
ResponderEliminarMejor, era entender una situación. Me alegro que te gustase.
EliminarUn abrazo
Tierna participación ;)
ResponderEliminarUn beso.
Sí, salió muy tiernita :-)
EliminarUn beso
Hola Albada cielo buenas noches me hubiera gustado estar ahi en ese reencuentro de blogeros cuantas amistades verdad ? muy linda la historia es como un cuento que se revive FEliz año amiga gracias por estar siempre mañana estaré para ir a saludar a todas y todos las amistades de los blogger gracias a ti por estar siempre aunque han pasado muchas cosas como la muerte de dos sobrinos mios con una semana de diferencia asi que aunque yo no he dicho nada no ha sido bonita la navidad besitosssssssssssss
ResponderEliminarPriemro darte el pésame, porque cuandos se van jóvenes, nos dejan devastados. Lo demás no es importante. Que el duelo sea lo más suave posible.
EliminarUn abrazo, y feliz día
Pero qué cosa más linda este relato! ternura,amor, inocencia!
ResponderEliminarMe ha encantado, sabes conjugar tan bien las emociones que nos quedamos pegados a cada texto que publicas!
Un abrazo.
Muchas gracias, Luna, me alegra que mi estilo te llegue, la verdad.
EliminarUn abrazo grande
Maripau, que bonita historia, de amor, nostalgia y amistad.
ResponderEliminarBesos.
Era recuperar una ilusión, y para ello hay de dar siempre un paso, hacer algo, quedarse llorando no sirve de nada.
EliminarUn abrazo
Tierno, muy lindo relato amiga, saludos a la distancia.
ResponderEliminarGracias, Sandra, que tengas un bonito sábado
EliminarEs una historia muy bonita y te deja la posibilidad de imaginar otra historia, la del encuentro. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarUn saludo.
Muchas gracias, se reencontrarán, esa ilusión ha renacido, pero por supuesto, nadie sabe qué tal irá.
EliminarUn abrazo
Pues la ilusion es lo que importa. La reacción de ella es alentadora, gasolina en las ascuas. Esperemos que tarde mucho en llover. Momento en que tendrá que irse con la ilusión a otra parte, pero con la ilusion
ResponderEliminarBesosss amiga
Eso de la ilusión es, en efecto, la gasolina para cualquier actividad, y relación.
EliminarPorque no haya fuego que apague la lluvia triste. Un abrazo, amigo
Tierno, bucólico y con cierta magia para esa persona que supo calzarse al niño que llevaba dentro, tal vez con buen resultado.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho.
Un abrazo.
Que no nos dejemos atrás el niño que fuimos.
EliminarMuchas gracias. Un abrazo
¡Pero qué bonito que tierno....!
ResponderEliminarSiempre hay que dar ese paso, para que luego no nos arrepintamos de no haberlo dado.
Un abrazo.
Totalemente, y si sale mal, pues que salga mal, pero dejar de intentar ser feliz es de necios.
EliminarUn abrazo