sábado, 26 de octubre de 2013

El hacedor de burbujas. Para Humberto


Cada verano, con la excusa de que todo seca tan rápido, Pep era libre para jugar con el sol del lavavajillas, que birlaba a su madre, e irse por el campo a hacer burbujas de jabón.
Le fascinaba cómo eran etéreas, se elevaban con la más tenue brisa, y rompían en mil pedazos de lluvia efímera, produciendo una alegría tornasolada en la sombra de la vieja higuera.
Esa estación acababa, y el colegio le disponía de nuevos horarios y normas, de menos libertad para sus experimentos de jabón y luz. Mas, en su cuarto, como alquimista en ciernes, esquilmaba tiempo a sus deberes para seguir con su afición.
Su madre preguntaba desde el pasillo. -¿Pero qué haces?. Y él cada tarde respondía 
-Estoy estudiando.
Escondía una camisa vieja de su hermana que siempre andaba húmeda de agua y jabón, y acababa por salir a la hora de la cena, con la mirada llena de burbujas de ilusión.
Las notas parecían no responder a tantas horas de estudio, pero los padres le tenían catalogado como un niño solitario, gran lector  y buen chaval, con lo que dejaron que pasara el tiempo, y con él las ganas de Pep de seguir avanzando entre el agua y sus formas, entre los arcoíris sutiles, empapando sus mandiles con esencia a vocación.
¿Para qué sirve un talento?. ¿En qué unidad medimos un goce?. ¿Dónde ubicamos en las notas escolares la pasión por lo pequeño?
Pues yo eso no lo sé. Sí que hago burbujas de jabón con truco, que aprendí del gran Pep, que sigue activo, investigando…adivinen ahora con qué.

8 comentarios:

  1. Se te coló una e en vez una a en la frase de la madre y el resultado no huele bien.

    :P

    Besos.

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  2. "Muchas personas se pierden las pequeñas alegrías mientras aguardan la gran felicidad” (Pearl S. Buck).
    “Pasa con la felicidad como con los relojes, que los menos complicados son los que menos se estropean” (Nicolás de Cramfort).
    “Los hombres olvidan siempre que la felicidad humana es una disposición de la mente y no una condición de las circunstancias” (John Locke).
    "La verdadera felicidad cuesta poco; si es cara, no es de buena clase" (François René de Chateaubriand).

    Un abrazo.

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    1. Es que sencillo ser feliz, lo difícil es ser sencillo.

      Un abrazo, Macondo.

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  3. Es fantástico ver, cómo una cosa aparentemente tan sencilla, consigue fascinar de tal modo que te quedas embobado disfrutando de la creación de formas y colores con esas burbujas cargadas de ilusión.
    Un abrazo.

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    1. A mí me fascinó desde que le vi en TV3. En Port Aventura lo ví hace dos años. Y ni te imaginas, bueno, seguro que sí lo imaginas.

      Un abrazo burbujero, cascabelero y dominical.·

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  4. Desde hace un tiempo vengo reflexionando sobre el tema del talento. Todos tenemos talento para algo, de eso no tengo dudas, ahora si nos sirve o no, es otro asunto. Creo que muchos nos preguntamos si nos sirve, pero habría que evaluar qué implica que nos sirva. Si servir lo asociamos a ganar dinero, creo que allí está el error, tiene que servirnos para sentirnos realizados, felices, en comunión con la vida.
    En lo que a mí respecta, algunos dicen que tengo el don de escribir más o menos bien, pero pocos saben que no es algo que haya elegido, sino que fui atrapado por las letras y que, por más que quiera, no puedo escapar.
    Hace poco una empleada de una repartición estatal al completar un formulario, me preguntó: "¿A qué se dedica?", y lo primero que me salió, así, naturalmente, fue "vendo humo, escribo palabras". La mujer se quedó mirándome fijamente, hasta que le dije alguna que otra cosa para salir bien parado, pero me sorprendió mi propia respuesta. En fin...
    Muchas gracias por dedicarme este texto que tiene tanta magia, me ha llegado a lo más profundo, amiga Albada.
    Un beso enorme.
    HD

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    1. Viene de tus burbujas de hace unas tres semanas. Un texto que me resultó grato de leer y me hizo recordar este personaje.

      Eso de talento, como inclinación natural hacia algo, es lo que al final uno acaba manifestando. De una forma u otra, todos tenemos, como bien dices. Las inteligencias de Gardner, que habla de esas nueve posibles maneras de expresarlas es la que trabajo, o lo intento, cuando estoy con jóvenes.

      Un beso. Nos vemos.

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Ponen un gramo de humanidad. Gracias por leer.