De Google |
Pendiente del teléfono, mirando
al vacío, suplicando que el tiempo se encogiera y llegase temprano el segundo preciso
en el que tu voz sonase a través del móvil. Atada al tiempo de ese pulso en las
sienes, deseaba que acabara pronto la espera, y que
ese momento exacto, atado al vacío, me permitiese agarrarme de tu mano, nuevamente.
Esperando, aún atada el teléfono, poder desatar los segundos, colgar luego el aparato, olvidar las súplicas y los suplicios, y calmar a las prisas de la incertidumbre. Sin miedo al ayer, machacón, ni al porvenir , indeciso, ansiaba volver a sentir que estábamos unidos por un hilo invisible y sólido de esa pasión que mientras más daba, más desbarataba los minutos y segundos de la ausencia.
Malogramos esa magia por no haber sabido medir el espacio y el tiempo, por no haber podido entender que la distancia se parece demasiado al vacío, a pesar del hilo invisible. Nos alejamos, sin remedio, tal vez por un malentendido, pero el teléfono, con su enconado silencio, se negó a sonar, y nos perdimos, irremediablemente. Seguramente, para bien.
Salió el sol, las gaviotas volaron divertidas otra vez, las ventanas se tiñeron de nuevos amaneceres sin esperas telefónicas, las manzanas volvieron a oler a nuevas emociones y el corazón se dispuso a encontrar el ritmo justo en el que ninguna espera preludiaba y,a taquicardia alguna de ausencias.
Bach, siempre adecuado
La famosa "dependencia" del teléfono y "la persona" determinada...
ResponderEliminarUn abrazo.
No es mi caso, y de hecho, el teléfono hoy en día está un tanto obsoleto. Yo me aferro al teléfono, a la voz, sobre todo con mis hijos, quienes se han criado con la conectividad del wasap. De hecho creo que sólo conmigo usan la voz, y así al menos, imagino el estado de ánimo o los resfriados :-)
EliminarLa dependencia es el peor lastre para crecer. Un abrazo Grande, Rafael.
Es cierto que cuando nos despedimos prometemos teléfono diario, que luego es semanal y después es nulo, nada, acaso una feliz cumpleaños ya sin respuesta, el contacto sin imagen trae malos entendidos, nos faltan los gestos… y la mirada. “La distancia se parece demasiado al vacío”
ResponderEliminarEse olor a manzanas envuelve y contagia vitalidad. Abrazos contentos
Es que la distancia pesa. Pensaba en un amiga, casada con un hombre que siguió residencia en Madrid, a seiscientos kilómetros. Eran una pareja perfecta, de verdad, pero como dices, se pierde la presencia, por mucho skype que se use. No es buena manera de vivir con quien amas. Tan sólo para tiempos pequeños y si la relación ya está muy madura.
EliminarUn abrazo grande y feliz lunes, Ester
Lo malo es que con el teléfono, no se puede mirar a los ojos, ni sentir los latidos, ni notar el calor de las caricias.
ResponderEliminarBesos y no pierdas el olor de las manzanas.
Ese medio no contiene la mirada, que le skype no sustituye, peor lo intenta. La distancia es un problema para las relaciones. Un gran problema, pero las manzanas siguen oliendo a vida y anhelos, y ahí se han de aferrar quienes no quieren quedarse presos de las ausencias.
EliminarBesos y por un lunes de manzanas en almíbar :-)
El aparatoque nos mantiene unidos quizás a nuestra propia esclava dependencia.
ResponderEliminarUn beso.
Hay situaciones en que se convierte en las esposas, que nos dejan maniatados, y esa dependencia nos mata. Con lo bonito que es abrir las alas, caramba, y qué divertido es ver volar a las gaviotas, ya son ganas. :-)
EliminarUn beso, Alfred y feliz lunes
Antes se estaba pendiente de recibir correo postal, esas noticias escritas a mano, esa esperanza de que el amante añorado dé señales de vida con sus letras. Ahora, casi un siglo después, estamos pendientes del sonido del teléfono y su silencio es el que nos dice que no hay las noticias que tanto ansiamos recibir.
ResponderEliminarMuy logrado.
Un abrazo.
Mis padres se cartearon durante ocho años en total. Se casaron y no volvieron a separarse nunca. Esas relaciones hoy no puedo concebirlas. Luego ha sido le teléfono, durante décadas, el instrumento de contacto, que la menos permitía inmediatez y audición, y hoye ya con wasap y skype parece todo tan fácil, que no nos percatamos de que le tacto, el olfato, la mirada sobre todo, es la base para una relación feliz y duradera.
EliminarEl matrimonio de esa amiga, acabó durando seis meses. Ninguno podía renunciar a sus carreras profesionales. Y ya existía el skype, no creas. Resumiendo, que depender de llamadas, o mensajes, de cualquier índole, no es buena señal para una relación. Un abrazo y gracias. Feliz lunes Josep Mª.
El teléfono, en determinadas circunstancias, se vuelve una atadura porque estar pendiente de su ring-ring, con su consecuente ansiedad y temor, solo sirve para amargarnos la vida.
ResponderEliminarHa suprimido la cercanía y la verdadera emoción que produce el encuentro face to face.
Besos y hermosa semana, Albada.
Es un aparato sin precio. Para mí es un invento inestimable, y más ahora que con los móviles podemos avisar de retrasos por ejemplo. Sin embargo nos ata, al estar la pendiente. En el texto se abre la puerta a de dejar de estar dependiendo de un allamada que no llegó. Pero en la realidad deberíamos estar menos por el móvil y más por las personas que nos rodean
EliminarUn abrazo y por una semana perfecta para ti
Bueno pues como todo en la vida tiene su lado bueno y su lado malo.
ResponderEliminarEs cierto que se ha perdido un encanto especial, como el comunicarnos cara a cara, o como esas cartas de amor tan bellas, y esas felicitaciones con postales... en fin...
Ahora salimos a la calle como más seguros, si pasa algo llevo el móvil para avisar sin demora,lo correcto es utilizarlo solo para lo necesario. Ahora con las redes vemos a los jóvenes y no tan jóvenes cruzando la carretera con el móvil.
Es encontrar ese equilibrio que tanto cuesta.
Feliz semana Albada.
Un abrazo.
Todo tiene las dos caras de la moneda.Es verdad.Quien depende de otra persona, no importa por qué medio, debe romper las cadenas y volar. Pero la libertad a veces no se sabe gestionar, las mujeres, en general, menos.
EliminarUn abrazo grande y gracias por tu lectura. Feliz noche, carmen
Dónde esté la voz que se quite lo demás y si puede ser mirándose a la cara... tanta tecnología nos está alejando.
ResponderEliminarBesos.
La voz y la mirada. Para mí la mirada marca el camino, pero la voz, con sus estremecimientos, ritmo, tono..también me sirve. Pondré un post de miradas en un bar. Porque si uno no quiere, ni con la mirada abre las puertas
EliminarUn beso, Toro, y feliz noche
Justo a las tres de la madrugada, el teléfono sonó. Abrió los ojos y puso su mano en el auricular; no había nadie...maldijo al gracioso y de nuevo se quedó dormido.
ResponderEliminarLa siguiente noche sucedió lo mismo a la misma hora y tampoco había nadie, sólo el tono prolongado. Llegaban las 6 de la mañana y otra vez despertó con mal humor para averiguar que detrás del timbre no había nadie...
Conforme pasaba el tiempo, algún mal nacido no lo dejaba dormir pues cada dos o tres horas el ring ring lo despertaba y se desesperaba porque tenía que madrugar para trabajar.
Así llegaron mas días hasta que un día denunció a la policía que alguien le hacía la vida imposible sin dejarlo dormir. Aquella noche se mantuvo en vela y el teléfono no sonó. La policía al día siguiente le recomendó dormir o desconectar el teléfono durante una temporada para estabilizar el asunto. Su madre vivía sola en otra ciudad y además enferma, no lo podía desconectar.
Las noches siguientes pudo dormir porque el teléfono no se escuchó pero pasados los días, aquella maquiavélica persona volvió a las andadas y lo volvió a despertar...estaba desesperado.
María era su compañera de trabajo. A las 4 de la madrugada le telefoneó y al contestar le preguntó ¿qué pasa María? pero ella corto de repente. La telefoneo a su casa y su marido dijo que no habían llamado; el pidió perdón. Pero a las 6 de la madrugada María volvió a llamar y el enfuerecido contestó y ella colgó, entonces volvió a llamarla para decirle que las gracias aquellas se las metiera por donde fuera. El marido de María le respondió enfuerecido y por la mañana, María y el no se hablaron en todo el día.
La siguiente noche lo llamó Pedro, lo llamó Juan, basilio e Irene su prima y a todos le respondió con otra llamada para amenazarles si vilvían a llamar. Durante los días parecía un zombie y las noches se las pasaba en vela pendiente de toda esa gente que le habían tomado envidia por su ascenso en la empresa...Hasta duchándose sonaba el teléfono y el deseperado contestaba a gritos y amenazas como si todo el mundo estuviera en contra de el...
No iba al trabajo, no comía, tan solo bebía café y llamaba a la policía para decirles que su vida era un infierno; que no podía mas que trabajaba muchísimas horas al día y por las noches tenía que descansar.
La policía derribó la puerta al cabo de los días y el cuerpo de Andrés. se descomponía colgado del cable del teléfono. Un enfermo más; comentaba el diario del día siguiente.
Ese teléfono es realmente un aparato endiablado, de manera literal. Parece un guión hecho para Hotc Hitchcock. Excelente la intriga, la desesperación y el final.
EliminarEso es un teléfono maldito y lo demás son tonterías. Un abrazo
El teléfono ayuda, pero no es suficiente sin la ayuda de la presencia física.
ResponderEliminarUn abrazo.
Sustituir la presencia yo diría que es imposible. Ayuda la voz, es un poco más cálido que el whatsapp, pero como su presencia no hay nada. Es verdad
EliminarUn abrazo y feliz martes
Hola Alba , buen viaje lleve el pendejo .... Esto me hace recordar , una tarde como la que acabas de relatar , pero en mi caso , mi amigo que el pobre era invidente , llamo durante 4 días a casa de un desconocido y preguntaba por mi , tal fue el enfado del individuo , que le dijo "Mira Eduardo , esa chica no vive aquí o dejas de molestar , o te juro que a la próxima vez , llamare a la policía" y cual fue mi sorpresa que cuando lo vi a mi amigo este me quería pegar , y todo por que él se había equivocado por un numero , y a mi casa no llamaba , y al individuo lo llevaba frito , jajajajaj te deseo una feliz semana , besos de flor .... Ahhhh y muy buen relato , me a gustado mucho ;)
ResponderEliminarEs que puede jugarnos malas bromas. Yo recibí un mensaje de texto, SMS, que será lo moderno hace unos diez años. Decía que llegarían tres horas tarde. Que habían pinchado un arueda y que estaban por Tarancón.
EliminarAlguien se cansaría de esperar, ya ves. Un abrazo grande y feliz martes
Hoy las posibilidades están más a la mano si uno quiere comunicarse en la distancia, pero cuando solo era el teléfono o en su defecto una carta, es cuando realmente valía recibir ese gesto.
ResponderEliminarUn beso dulce y dulce semana.
Tienes razón. Mi madre intuía que recibiría carta de mi padre y se iba a la estación por si había llegado el tren con la saca de Correos. Luego el teléfono, invento donde los haya, y era casi magia escuchar esa voz cercana a pesar de la distancia. Esos gestos tenían un valor inestimable, que ahora lo dle wasap casi ni valoramos.
EliminarUn abrazo dulce y preciosa semana te deseo
Hoy las relaciones pueden ser a distancia, pero claro... cuando al final no hay contacto físico, llega un momento en el que todo se desbarata.
ResponderEliminarDependencia de una llamada... hace suspirar tu texto, Albada.
Muy hermoso. Todo muy bien relatado.
Felicitaciones
Un beso grande
Las relaciones a distancia son posibles, siempre lo han sido, y la tecnología está de parte de la generación actual, sin embargo, como dices, si no llega a haber un contacto físico, no sé si puede llevarse a buen término.
EliminarCreo que quien hablaba en mi post, tenía derecho de hacer su vida, sin pensar en llamada alguna. Un abrazo y gracias.