Cogí semillas de zanahorias y me puse a sembrar. Es
laborioso. Ya me advirtieron, pero el conejo blanco que me regalaron para el
número de magia resultó ser un glotón.
Ahora no cabe en mi chistera, ni en ninguna manga de mi
disfraz de chino, pero tampoco soy capaz de cocinarlo.
Recambios para el corazón
Sin poder superar su muerte
siguió yendo cada tarde. A las cinco, como siempre, caminaba hasta la fuente
del bosquecillo. Siguiendo la costumbre, se sentaba en un poyo de piedra, extraía de una bolsa dos manzanas y se comía la suya. La otra quedaba apoyada junto a la
fuente. Sacaba luego la radio de bolsillo y sintonizaba la emisora de música
clásica.
Cuando un día se acercó Serafina
la coja, conversaron. Sabía de su reciente viudedad, más esperable que la suya
propia. Nunca superó la pérdida de su
Josefa, pero con el tiempo aprendió a vivir sin ella, descubriendo que Serafina también le hacía
feliz.
La fructifera fuente de los viudes. Igual da para manzanas que para medias naranjas. Una joya de fuente y de relato
ResponderEliminarBesosss amiga
Esa fuente tenía magia, seguro :-). Gracias, amigo. Un abrazo
EliminarEl primero es muy cómico.
ResponderEliminarEl segundo conmueve.
Besos.
El primero bien pudiera ser, pero el segundo es, no te quepa duda.
EliminarUn beso
Dos micros que nos dejan la enseñanza del amor, el primero por la glotonería del conejo el segundo seguir viviendo también es una acto de amor, y poder volver a ser feliz sin olvidar a quién se fue. Precioso. Un besico.
ResponderEliminarCreo que rendir homenaje a quien se fue, es seguir viviendo, sin cerrar puertas.
EliminarUn abrazo, y muchas gracias, Campirela
Dos relatos diferentes y bien logrados en esa versión "micro"...
ResponderEliminarUn abrazo.
Son muy pequeños, necesariamente, claro.
EliminarUn abrazo
Buenos micros los dos, el segundo más redondo me encanta.
ResponderEliminarUn beso y feliz domingo.
El segundo es fiel reflejo de una realidad. La vida sigue, es imparable.
EliminarUn abrazo
El primer micro relato, me ha hecho sonreír al ver la imagen de ese conejo gordito y glotón.
ResponderEliminarEl segundo es hermoso y lleno de ternura. Nunca se olvida el gran amor de una vida, pero otras personas pueden acompañar en la felicidad.
Un abrazo.
El primero es así de simplón. El segundo muestra la realidad de los renaceres, posibles siempre.
EliminarUn abrazo, y gracias
Los recambios para el corazón a veces también salen de la chistera. Conviene, pues, tener siempre una buena chistera a mano y si es con capacidad mejor que mejor.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo, los renaceres son posibles, y a veces parecen salidos de una chistera muy amplia, es verdad.
EliminarUn abrazo
Muy buenos los dos!
ResponderEliminar👏🏼👏🏼👏🏼👏🏼
Gracias, amiga. Un abrazo
EliminarHa vuelto La ser, interesantes micros, el primero muy lúdico y el segundo incluso puede dar para algo más extenso, porque es así, cuando alguien nos hace feliz, nos hace olvidar lo demás.
ResponderEliminarUn beso dulce y dulce semana.
No sé si olvidar, pero una segunda oportunidad nos rejuvenece. Y mucho.
EliminarUn abrazo
Relatos entre el humor, y el sentimiento humano. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarHumor y sentimientos tal vez son los atributos más humanos.
EliminarUn abrazo
Hola, el primer micro me ha hecho sonreír imaginando a ese conejo glotón... y el segundo es muy tierno y emociona en tan pocas líneas, así que mucha suerte en esos micros de la Ser.
ResponderEliminarUn beso enorme
Pues gracias. No son seleccionados, algunos ni los envío ya, pero me hacen escribir
EliminarUn abrazo
Boa tarde Alba. Você sempre se supera e nos trás histórias sempre interessantes.
ResponderEliminarMuchas gracias, Luiz. Un abrazo
EliminarDos micros tan diferentes como hermosos.
ResponderEliminarCada uno con su sello de identidad, y siempre con tu pluma hábil y fantástica.
Un beso!
Mucahs gracias, de hecho escribir me ha de producir gozo. Y cualquier tema es bueno.
EliminarUn abrazo, Luna
Hola Albada.. Me disculpo por no poder estar más en los comentarios de los Blogs. Siempre es un placer leerte, tus relatos son la vida.
ResponderEliminarUn abrazo.
Tranquilo, eso de los blogs es un hábito agradable, pero sólo si hay tiempo.
EliminarMuchas gracias. Un abrazo
Dos joyitas de micros que dan para mucho más!
ResponderEliminarUn abrazo
Seguramente, el primero siendo cómico da mucho de sí, y el segundo es el inicio de una relación.
EliminarMuchas gracias. Un abrazo
Dos bellos relatos, el primero de ellos desprende ternura y amor el segundo, igualmente amor, cuando el ser querido se va, nada ni nadie puede ocupar nuestro corazón pero siempre queda un pequeño rinconcito que compartir con algún ser querido.
ResponderEliminarDos preciosos relatos Albada con tu sello propio.
Un gran abrazo y buena semana entrante.
Me alegro que lo veas así. El segundo de hecho es muy posible. Uno cree que sólo nos hace feliz nuestra pareja, a quien amamos, pero luego puede ser un gozo decubrir que alguien, después, encuentra un rinconcito en nuestro corazón.
EliminarUn abrazo enorme, y feliz semana
El primero es pura magia... y el segundo todo sentimiento. Me han encantado, Albada. Te felicito.
ResponderEliminarMil besitos y feliz semana ♥
Muchas gracias. Porque la semana te llegue sensacional. Un abrazo
Eliminaren teoría hay más viudas que viudos, por la mayor esperanza de vida de las mujeres. en cualquier caso, tiene que ser muy duro perder a tu cónyuge. aunque siempre se puede recuperar la ilusión, como ocurre en tu relato.
ResponderEliminaren cuanto al conejito, esperemos que su alimentación no resulte más cara que los ingresos obtenidos por las actuaciones del mago. ;)
abrazos!
Sería cara la laiemntación, imagino :-). Esas parejas de tiempo de descuento ocurren, y cada vez más. Claro que el vació de esa pareja es enorme, pero en el corazón caben más afectos que pueden ser amor.
EliminarUn abrazo, y buena semana
Un regalo a la imaginacion. Muchas gracias.
ResponderEliminarSin ella no se ntiende la vida, o yo no la entiendo
EliminarUn abrazo, y gracais
Distintos, pero cada uno con su encanto. Me gustan los dos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias, Macondo. Por una buena semana. Un abrazo
EliminarDos formas de ver la vida. Con la sencillez de las cosas cotidianas, las de verdad.
ResponderEliminarUn beso.
La magia de los conejos de una chistera, por ejemplo. Sí, es que hay cosillas que son importantes, en el día a día también.
EliminarUn beso
Una belleza como regalo a nuestra imaginación. Siempre llegas a nuestros corazones. Gracias por compartir esta genuina prosa, Albada.
ResponderEliminarAbrazos y buen comienzo de semana.
Pues muchas gracias. Me alegar que vesa humanidad en mis textos
EliminarUn abrazo, Joaquín, y por un día sensacional
Con sus grandes diferencias, me han encantado ambas historias por igual.
ResponderEliminarEnhorabuena por tu maginación y por cómo sabes contar lo que sale de ella.
Un abrazo.
Imaginar me es muy fácil, la verdad, pero luego resulta que toco de pies en el suelo :-)
EliminarUn abrazo, y muchas gracias
Diferentes pero muy buena las dos. Tienes una imaginación prodigiosa. Te admiro. Un abrazo
ResponderEliminarImaginar era algo que hacía mucho en la infancia, y me lo permitieron, así que echo mano de ella :-)
EliminarUn abrazo, Chelo
Chelo tiene razón, dos relatos que no se parecen en nada, pero los dos me han gustado. Más entrañable el segundo.
ResponderEliminarBuena tarde y un abrazo.
Son como que de dos personas que escribieran, pero lo que ocurre es que a veces me pongo en plan jocoso, me gusta, y otras soy más de sensaciones.
EliminarUn abrazo, y gracias
Qué bueno el primero, me ha encantado. Da pie a imaginar mucho... :D
ResponderEliminarEl segundo es más clásico, pero muy bonito. Nunca se sabe qué nos depara el destino, por eso hay que hacer caso al corazón, que siempre sabe dónde llevarnos.
Un abrazo.
El segundo es muy clásico, y de hecho habla de renaceres, más que posibles. A veces diría que terapéuticos.
EliminarMuchas gracias. Un abrazo, y por un bonito día
Unos relatos muy buenos e interesantes
ResponderEliminarbsss
Son simples. Me alegra que te gusten. Un abrazo
EliminarLeo tus relatos y veo más que un conejo gordo y un viudo perturbado. Encuentro en ambas un valioso contenido que me hace difícil establecer cuál de las dos historias es la mejor.
ResponderEliminarLa primera refleja el sentimiento que se puede alcanzar con quien se compartió momentos importantes, aunque el tiempo hubiera cambiado su aspecto (simbólicamente el conejo crece, engorda, se hace poco útil), pero ello no impide que se realicen mayores esfuerzos y sacrificios para seguir unidos. Y esto ocurre, cuando el cariño es más grande que todas las dificultades.
La segunda, es una historia de superación (incluso de aceptación y retorno a la realidad).
Tras la viudez, volver a darse una oportunidad de amar no significa traicionar u olvidar a quien se amó, significa simplemente, aceptar la tragedia pasada y tener el valor de seguir viviendo a pesar de todo.
Autora, aplaudo tu capacidad creativa y tu invitación al pensamiento.
¡Gracias por tu bella labor!
Un anaimal al que das nombre, pasa a ser en parte, uno de tu familia, y la antropofagia no me entra en la cabeza :-) El segundo es reconocer que hay segundas oportuniddes, para el corazón y para la vida.
EliminarMuchas gracais. Es un piropo que agradezco de verdad. Un abrazo, y por un día de fábula