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sábado, 20 de septiembre de 2025

La prisión de los olvidos.

De Lecturalia

He dibujado tu cara, con más pena que gloria. 
Con un carboncillo que dormía en un plumier olvidado.
He hecho un boceto y he mirado mis manos. 
Mis dedos artrósicos me traicionan 
o los  recuerdos se me  confunden entre los verdugones de los años.

Una cara que ahora encuentro ajena, 
me mira desde  un bloc  
Arranco el mamarracho, 
quedando pedacitos en la espiral metálica.  
Esa espiral, tan superior,  con su vertical visión del mundo. 
La que divide la realidad de lo que sucedió.
Hago un esfuerzo para arrancar con precisión 
los fragmentos perforados de este intento de dibujo. 
Para desincrustar con ellos los últimos retazos de ese recuerdo confuso.

Quedo exhausto y pensativo 
con un dolor derramando  escarcha 
entre las falanges y esa instantánea de dos jóvenes 
asomados a una noche cuajada de estrellas.

Yace en la mesa de la cocina una bola de  papel, 
junto a la caja de calmantes y frente a un plato de loza.
Los recuerdos van derramándose 
entre los azulejos hasta desaparecer, en esta prisión de los olvidos.




Mañana, en el café de la esquina, intentaré volver a recordarte, a recuperar las líneas de tu torso mientras cocinabas cantando... esa canción, sí esa. Que ahora no recuerdo. 



24 comentarios:

  1. Un buen poema y muy profundo, felicidades.
    Un abrazo.

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    1. La demencia forma parte del declive de algunas personas.

      Un abrazo fuerte. Rafael.

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  2. Bonito poema con un tinte muy triste Abada.

    Besos.

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    1. Pensaba el Alzheimer, los inicios insidiosos. Muchas gracias.

      Un abrazo

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  3. Qué lindo lo escrito y a la vez que de verdad . Recuerdos de un pasado , que no volverá.
    Preciosas palabras en unos bonitos dibujos.
    Un abrazo Mari Pau . Alegría de leerte de nuevo por aquí.


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    1. Imaginé a un tipo con recuerdos confusos, y la prisión de olvidos.

      Muchas gracias, Campirela. Un abrazo fuerte

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  4. Entre la reflexión y la amargura de los recuerdos. Un abrazo. Carlos

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    1. La neblina de los recuerdos, con instantes de rabia.

      Muchas gracias. Un abrazo

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  5. Hay pocas posibilidades de que mañan salga mejor el retrato, si acaso peor.
    Tampoco de que sea algo positivo hacerlo. Y tampoco que pueda evitarse.
    Un poema melancólico como no puede ser de otra manera cuando empieza el deterioro.
    Besazooo, amiga

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    1. El declive humano, con sus sombras, y sí, seguro que al día siguiente no saldría mejor.

      Un abrazo fuerte, amigo

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  6. Regresas con un magnífico poema, preñado de amargura.
    Bienvenida. Se te echaba en falta.
    Un abrazo.

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    1. Gracias, otoño y declive se dan la mano aqui.

      Un abrazo grande.

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  7. bienvenida de nuevo, albada! vuelves con un poema muy evocador. dibujar es contar historias con carboncillo o colores. escribir poemas es como dibujar con palabras.
    abrazos!!

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    1. Dibujar aquí era el medio de quien olvidaba, o recordaba como en medio de una niebla densa.

      Muchas gracias.

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  8. Una prisión de olvidos que no podemos olvidar, de la cual casi no podemos escapar. Y también dibujas?! Un placer volver a leerte.

    Un beso dulce y dulce otoño.

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    1. No dibujo, me encantaría, pero no. Esa prisión no tiene llave ni puerta de salida cuando acaba siendo el diagnóstico tremendo, el Alzheimer.

      Un abrazo, y muchas gracias

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  9. Nos llevas a meternos en la piel de esta terrible enfermedad que nos arranca lo más preciado: la memoria.
    Un abrazo

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    1. He entrado sin meterme en Google, lo siento, salió anónimo, era mi comentario!
      Buen martes!

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    2. Es el principio, luego empeora exponencialmente. Y es una destrucción masiva, (para quien lo sufre quizás menos), para la familia. Es dejar de ser uno quien es, o quien fue, porque no hay vuelta atrás en esa prisión de los olvidos.

      Un abrazo y gracias.

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  10. Un relato emotivo y evocador. Creo que el amor verdadero nunca queda en el olvido, en especial cuando quedan los dibujos, los poemas y los relatos.
    Te acompaño en este regreso otoñal a Blogger.
    Un besazo, Albado

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    1. Albada*
      Perdón, no me di cuenta del fallo hasta que se publicó *.*
      Otro beso

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    2. Gracias. La poesía cuando te alcanza no te deja marchar.

      Por el otoño, estación de ocres en abanico infinito.

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  11. Hola, Albada. Me alegra leerte de nuevo, aunque se me haya encogido el corazón. Maravilloso. El paso del tiempo tiene el poder.
    Un abrazo.

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    1. El tiempo siempre es sólo tiempo. No es cruel ni benévolo, pero el olvido es dejar de ser. Eso es la crueldad más grande. Que no nos toque el Alzheimer nunca.

      Un abrazo, y muchas gracias

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Ponen un gramo de humanidad. Gracias por leer.