La vi asomada al estanque, con
intención de ver de cerca a un pez naranja y blanco, una carpa grande que a todos nos había llamado la atención por su tamaño y agilidad. En ese oasis artificial del jardín de
Majorelle, ajena a sus padres, embelesados ellos ante unos cactus plantados con el
mejor buen gusto, la nena se empeñaba en acercarse al agua. Fue escalando con la facilidad de los niños. Antes de caerse al agua, creyó haber visto la mano de una muñeca. De
su muñeca.
¿Es un relato, un recurso literario? Me he quedado en suspense, tus finales son explosivos. Uff casi me voy sin dejarte mi abrazuco
ResponderEliminarEl final es abierto porque el carpo de la nena podía ser la visión premonitoria de su futuro inmediato, o una muñeca querida que sin saber cómo había naufragado en el estanque.
EliminarUn abrazo
¡Qué angustia!
ResponderEliminarUn abrazo.
No cayó al estanque, y de hecho, de haber sido así no se habría ahogado la cría, pero verla mirar y escalar me dio pie para especular.
EliminarUn abrazo
Microrelato que bien lo podría haber firmado Alfred Hitchcock.
ResponderEliminarUn abrazo.
La intriga queda en la cámara delantera, qla que captaría la mirada de la nena, los bracitos hacia el agua, y un primer plano de una manita. Tal vez la suya.
EliminarUn abrazo
Microrelato con suspense.
ResponderEliminarUn abrazo.
Acaba bien, porque no pasó nada, pero qué tentador inventar una historia más allá de la curiosidad infantil anodina ¿no?
EliminarUn abrazo, Rafael
Relato de una desgracia en primer plano.
ResponderEliminarUn beso.
La imaginación, la mía en este caso, inventa una historia de un posible. Puede que la mano poderosa de un padre corriendo detenga el presagio de la imagen
EliminarUn beso y feliz sábado
Tremendo. Las palabras justas para estremecernos.
ResponderEliminarmariarosa
Podría haber estado más parca y exacta para provocar la inquietud que pretendía, pero intenté, en efecto, poner en situación, y dejar luego con final abierto
EliminarUn abrazo
Se le cayó una "y" a "creyó", o eso me parece.
ResponderEliminarBesos.
Para variar, me como letras. A veces son conjunciones o preposiciones, así que esta vez quedó "suave" el fallo :-). Gracias Toro
EliminarUn beso
Intrigante y algo angustioso. la foto muy buena.
ResponderEliminarBesos Albada.
Suerte que era de día, si no habría tenido más intriga y angustia. Gracias Rafa
EliminarUn abrazo y feliz sábado
Qué bueno, querida amiga. En qué brevedad se puede decir mucho más de lo que se lee. Un trasfondo para pensar e imaginar. Quizá una premonición de lo inevitable, quizá… porque el final queda abierto y a disposición del lector.
ResponderEliminarMe encantó. Y la foto muy buena.
Un abrazo enorme, y muy feliz finde 😘
Ufff si llega a ser real , vaya disgusto tan grande y es que algunas veces los padres se olvidan que van con niños , no hace mucho vi , como una madre corría detrás de su hijo calle abajo , mientras el padre iba tan tranquilo mirando el móvil , ahí queda eso muy buena foto , te deseo un feliz Sábado besos de flor.
ResponderEliminarPodría haber sido real. Cómo no. Los niños se sienten atraídos por tantos imputs visuales que en dos segundos, en uno solo, se nos pierden. Ese padre miraba el móvil. Pues ayer una madre miraba un plano, con ambas manos, justo al final de una escalera, en un parque de atracciones. La nena, de dos años justitos, llevaba el bulto del pañal, bajó dos escalones y creí que rodaba el resto, por suerte volvió arriba con la madre, pero el susto me lo llevé yo.
EliminarUn abrazo
Ouch. A veces dan ganas de tomarlos y ponerlos a salvo :)
ResponderEliminarYo hice el gesto de cogerla, porque me pareció en riesgo inminente. No pasó nada. Ni ayer con la nena del parque de atracciones, pero en un instante pueden desaparecer de la vista. Un programa que vi, con dos niños pequeños, me gustó un arnés en forma de mochilita de animal. De ahí salía una correa y me pareció un invento genial
EliminarUn abrazo
Eres la maga del suspense. Atrapas la atención desde el minuto uno.
ResponderEliminarMe parece un intrigante y buen relato, enhorabuena.
Un abrazo.
Gracias. La vida está llena de instantes, de flashes que pueden acabar de cualquier modo. :-)
EliminarUn abrazo
Albada, amiga, lograste llevarme a la cima del suspenso. Déjame así, no me expliques nada.
ResponderEliminarSaludo colombiano desde la distancia azul.
La gracia está en ese final abierto, tienes toda la razón. :-)
EliminarAbrazo grande desde el otro lado del charco
Un final misterioso, que da para hacer la propia reconstrucción de los hechos.
ResponderEliminarLos padres muy descuidados, ella muy valiente, como la mayoría de los niños... Y el final... Prefiero no contar lo que he pensado, porque me da mucha pena :)
Un beso grande, Albada.
Los niños son muy curiosos y hábiles lo que les hace imprevisibles. Se les vigila con cuatro ojos y aún así, en un segundo, se caen, o tropiezan, o se escapan-
EliminarUn abrazote. Feliz lunes
Los hijos únicos se han de inventar amigos invisibles o adoptar amigos entre sus muñecos. La nena seguramente tiene unos padres amantisimos, que no podrán cubrir sus necesidades de compañerismo infantil
ResponderEliminarMuy buena tu reflexión. Un abrazo grande
Una niña abandonada a su suerte. Ojalá su muñeca pudiera echarle la mano que no le supieron dar sus padres. Un microrrelato muy tierno y sensible.
ResponderEliminarUn abrazo.
Una nena cuya postura hace pensar que puede caerse, por su propia curiosidad, infantil e insaciable.
EliminarMucha gracias por tu lectura. Un abrazo
Antes de nada preguntarte si la foto es tuya, me gusta tanto como tu tierno relato. Y es que da la impresión de que la niña se quiere tirar.
ResponderEliminar¿Continuará tu relato?
Un beso enorme, preciosa.
La foto es mía, sí. La realidad es que los padres estaban cerca, distraídos, como muchos padres hoy en día que prestan más atención a sus smartphones que a los hijos :-)
EliminarUn beso, dulce María. Feliz miércoles.