Fotografía de internet |
Te vimos pequeña,
con ojos de cachorro incomprendido.
Temblorosa, sucia… huraña,
atada a un contenedor para el olvido.
Te miramos, tras la ventana.
Pidiendo a duras penas, casi a gritos,
ser cobijada bajo un ala.
Te miramos, y nos enamoraste aquel domingo.
Has hecho de guardiana,
de risas, de llantos, de ese crecer de
los niños.
Tú ignoras que no eres humana,
pero nos acompañas como… el mejor de los
amigos.
:)
ResponderEliminarSon mejores que los humanos.
Besos.
No lo sé. Más nobles...eso es indudable. Sus doce años son un gozo para nosotros.
EliminarSin pedigree. Ni falta que hace. La queremos. Un beso.
¡Qué bonito! Me ha encantado ese "Tú ignoras que no eres humana".
ResponderEliminarY cómo se hacen querer.
Un abrazo, Albada.
Es que no sabe por qué no se sienta a la mesa como todos. Se sube en el sofá para estar a nuestra altura. Se lo explicamos a menudo, pero no lo entiende. Pasan los años, tiene canas... y sigue sin saber que ella es un perro.
EliminarUn abrazo.
Me ha gusta do mucho el comentario de "Tú ignoras que no eres humana", porque parece cierto. ¡Que naturalidad, que sencillez, que belleza!
ResponderEliminarUn alumno, que te da un abrazo.
Sí, nos miran sin entender por qué ...lo que sea. Y siempre, siempre y siempre están ahí. No nos dejan jamás de acompañar, en lo bueno y en lo amargo.
EliminarDeja ya la tontuna esa, no?. Un abrazo, Peter. Observador mayor de la vida.
¡Mis queridas mascotas!
ResponderEliminarMe has pillao con un borrador a falta de ilustraciones. Cuando las tenga, el borrador verá la luz. Me encanta leerte.
Besos y abrazos.
Las mascotas son el refugio de la mente, la amistad jamás evitada, ese ser vivo que nos regresa al origen de las pequeñas satisfacciones y diminutos motivos para sentirse feliz.
EliminarNo en vano son terapéuticas. No en en vanos los queremos. Fuerte abrazo.
Intenta que seaís mejores personas, que cumplaís vuestros compromisos solidarios, que no ignoreís las otras especies, el mundo es para todos.
ResponderEliminarEllos, los perros en mi caso, nos exigen un mínimo sentido de responsabilidad y la sensación de que somos necesarios para alguien. Y luego resulta que nos regresa con creces los gestos de amistad. Siempre dando más de lo que te piden.
EliminarUn abrazo
Me gusta todo menos el título. La verdad es que hay mascotas que, aunque no hablan, saben usar el lenguaje de la amistad como nadie y, por ello, hacerse querer como la mejor y más deseada compañía. Abrazo.
ResponderEliminarEl título es que parecía empalagoso, saliendo así tan a su modo, como suelen salir mis cosas. Ese pudor ante lo kirsch contempló la palabra "infantil", naif y acabó en "plasta". La amistad de una mascota, en especial de los perros no tiene parangón.
EliminarUn abrazo
Precisamente tengo aquí a mi ladito a mi mascota, no es un perro, pero es mi gatita, mi mejor amiga, y para ella, también, además, soy su mamá, me sigue a todas partes, juega conmigo, y como dice Francisco, aunque no hablen, usan el lenguaje de la amistad, porque yo la entiendo a la perfección con esa mirada tan tierna como me mira.
ResponderEliminarUn beso.
Para que luego hablen de problemas idiomáticos. Si la amistad se entiende sin palabra alguna!. Ellos nos la ofrecen siempre a modo completo, desinteresado y sin condiciones de compensación. A ves, bien iríamos de actuar como ellos.:-)
EliminarUn beso.
Ya recuerdo esta entrada, y también te hablaba yo de mi gatita, si es que se les coge mucho cariño.
EliminarMás besos.
Por supuesto, cada mascota cumple la condición de acompañar y dar cariño. Y de recibir nuestros cuidados y atención. Soy más de perros, pero vivir con Lego, un gato rubio, me ha hecho reír mucho.
EliminarLego ahora vive con el hijo que lo rescató, pero le sigo viendo y sigo sintiendo qué tanto dan de compañía. Un beso