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martes, 28 de noviembre de 2023

LA LUNA COMO ESCENARIO

 


Cuando la luna se enciende
se ilumina mi mirada.
Hay algo que ella me trae,
cuando se alza en mi ventana,
y estremece mis latidos
dejándome más liviana.
No siendo nada lunática
me da por contemplar la luna.
Qué busco me pregunto.
Tal vez otra cara oculta,
como la mía, que sonríe.
A veces inoportuna.
Me asombra cuando se asoma
sobre un mar de espuma blanca.
Me embobo mirando el cielo
cundo con burla se arranca
a titilar revoltosa
a lomos de un mar en calma.
La luna que tú y yo vemos
es la misma, no lo ignoro,
y si pido que la mires
es porque me demoro
recordando tus abrazos
teñidos de grana y oro.
Cuando ambos la miramos
un hilo invisible nace
entre tu casa y la mía,
como un puente o un enlace
que me hace estar en paz
sin que nada me atenace.
Maripau González Bodeguero. Anora con un Facebook diferente.

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miércoles, 22 de noviembre de 2023

QUIERO IR AL AMOR, NO A UNA GUERRA

 

                                                                 Imagen de El Heraldo

Me gustaría ser capitán.
Me apunto a ser alistada
a un ejército de amores
con las armas más preciadas.
Las sonrisas por bandera,
las manos tendidas, blancas.
El corazón palpitando
y bibliotecas pobladas
con poemas de fe y amor,
con historias bien narradas.
No serviré a guerra alguna,
ninguna hay que lo valga,
ninguna alienta el amor
sólo dolor y matanzas
que se perpetúan, sin pausa,
con posteriores venganzas
entre personas que dejan
sombras más que alargadas
cuando sin guerra se saben
unidos por la esperanza.
Reivindico la alegría
de quien en paz se levanta.
La placidez de las madres
tranquilas en su crianza.
La seguridad de un joven
que su vida recién alza.
Sean mis versos un canto
que derribe las murallas,
que acalle los mil cañones
que amputan las madrugadas.

viernes, 17 de noviembre de 2023

ME SUELO OLVIDAR QUE TE OLVIDÉ

 


A veces no recuerdo que te olvidé,
que te creí muerto, y que sobreviví,
huérfanos mis abrazos de tu ceñir.
Es que supuse incluso que te soñé.
A veces dudo si en verdad viajé
de tu brazo por un mundo por abrir.
Si esas fotos simplemente las urdí
en un intento por amarte que inventé.
Sea verdad o no que te curaste,
olvidar tu teléfono fue duro.
como lo fue creer que me olvidaste.
Sentí que te perdí, eso seguro.
Mido para qué tanto afán en olvidarte,
sI de tarde en tarde aún te escribo.

Maripau González. La Pineda 27 diciembre 2022

miércoles, 15 de noviembre de 2023

TUS MANOS MIEL SOBRE HOJUELAS

 


Escalé a tu cuello con mis labios,
dibujando gaviotas de carmín.
Tus manos hacían florecer mi piel
que se erizaba al roce de tus dedos.
Mis besos buscando más colinas,
más rincones, más senderos.
Tus dedos pulsando, sin partitura,
mis cuerdas de guitarra por afinar.
Mis manos deshaciendo los embrujos
de pasados caducados y obsoletos.
Tu boca redimiendo mi cintura,
abriendo mis caderas como rosas.
Tus palabras en mi oído, susurrando
los versos de un poeta enardecido
Mis silencios truncados por el son
de los más intrínsecos gemidos.
Cabalgar tu cintura era una fiesta
de sensaciones en rincones escondidos,
al galope de mis ansias y tus goces
a la espera de otro mar embravecido.
Rotas las compuertas de mis muros
no dejase almena por reconquistar
ni yo armadura que aguantase
tu inmensa necesidad de amar.


Imagen de la red

domingo, 12 de noviembre de 2023

TORMENTA SECA

                                 


 

La humedad en el ambiente,

el aroma a sal y viento,

el bochorno empalagoso

preludiaba un cielo cruento.

 

Sin rayos ni truenos graves,

sin lluvia amable alguna,

me empapé de reflexiones

bajo la tímida luna.

 

Sin charcos, y sin paraguas.

Sin acúmulos de barro,

tomenta interior hirviendo

ante el humo de un cigarro.

 

¿Qué caminos se te abren,

cálculos de equilibrista,

cuando no hay cinta métrica,

y te has de fiar de tu vista?

 

Tal vez te espere un paisaje

de un mar que a ti te cobije

del aguacero del alma,

que sentías y  del que huiste.

 

Hoy camino a pecho abierto,

me dejo mojar, ya mansa.

Porque llueva y que se lleve

todo lo que ya me cansa.

 

Indecisiones absurdas,

trampas en el solitario,

mochilas que me lastraban,

y muertos en mis armarios.

 

Por la lluvia, que ella limpie

caminos que transitar,

anhelos que conseguir

y sueños que echen a andar.

 

 


viernes, 10 de noviembre de 2023

SOÑANDO A PODER VOLAR


 


 

Desde la energía oscura

que habitaba dentro de él,

en un ataque se subjetividad

se elevó valiente, y voló.

 

Fue un inicio pintarrejeado

de incertidumbres varias,

de un parpadeo intenso

y de una enorme ansiedad.

 

Con porcentajes de miedo,

anquilosamiento ligero

de miembros desentrenados,

sus alas  le respondieron.

 

El suelo duro y tan frío

le había dejado confuso,

alicaído, sucio y maltrecho

pero con  gran curisodad.

 

Aturdidas y torpes,

movidas  a trompicones, 

desde su atávico instinto,

notó cómo se elevaba.

 

Cuando  tropezó sin más

con una corriente cálida,

descubrió, asombrado,

que podía ver y planear.

 

Desaparecieron entonces,

lentamente, sus temores,

las ideas preconcebidas,

y los resquicios de dolor.

 

Reencontró,

en ese instante y no otro,

la incuestionable certeza,

de saberse libre y volar.

 

viernes, 3 de noviembre de 2023

AMANECERES CON TRAMPAS

 

 



 

Amaneció sin colores.

El silencio de su amante

duraba ya mucho tiempo,

era un pesar lacerante. 

 

Pasaron lentas las horas.

Le esperó día tras  día,

pero el amor no la escuchaba,

quizás ya la reconocía.

 

Sus rizos y sus pestañas

nadaban en  algún mar,

buscando la fantasía

que no consiguió inventar.

 

Quedó varada e inmóvil,

en una red con sirenas,

abalorios , baratijas,

poesías propias y ajenas.

 

Mas amaneció otra vez,

y es que no hay tormenta eterna

ni corazón que se muera

ahogándolo en la taberna.

 

La mañana llegó al fin

recitándole al oído,

“Él no llegará  jamás,

destierrálo en el olvido”

 

Ella, una dama triste

que acunaba su añoranza

recluyó algún recuerdo,

ya perdida la  esperanza.

 

El tiempo se fue llenando

de noches y despertares

permitiéndola esquivar

enrocamientos lunares.

 

Un sol de estreno la vió

con la mirada radiante,

acicalada de espuma

viviendo sólo el instante.

 

Él yacía en un rincón

de fotos sepias y olvido,

entre rastros de mareas

y de puertos sin sentido.