Esculturas de Jassans. |
Vivió el amor. Leyó, devorando de forma incansable, sobre todos los
tipos de amor.
Pasó el tiempo. Se
enamoró del hálito de esa tinta, donde la sensación de amar planeaba sobre los
personajes, reales o ficticios.
Llegó a la jubilación entre libros y poesías, los
trajines de la notaría, y la trastienda de los museos. La conocí a sus setenta abriles, con su sordera, sus cataratas seniles sin mayor trascendencia, y no pocos recuerdos, que en alguna ocasión se avenía a compartir
conmigo.
A falta de hijos, y con un gato esquivo, mis visitas le regalaban un
rato de irrealidad, donde abocar pesares, alegrías, y algunas anécdotas que adornaban su corazón y sus sienes.
Un día, cuando pasaba las páginas de fotos en sepia, de un álbum también en color sepia, cerró súbitamente la tapa y se levantó. Ágil y apresurada, cogió un libro de la estantería de una vitrina donde, desde el
primer día que estuve en su casa, yacía un caballito de cristal.
Me entregó el libro, diciendo –
La realidad es que el amor es pura
literatura-, mientras reacomodaba el
caballo siempre reluciente junto a un cisne gris perla, de cristal también.
Como me fue imposible no
aceptarlo, lo dejé en la mesilla. Se
titula “Tres metros sobre el cielo”, primera obra de Federico Moccia. Que acabaré por hojear, un día de estos.
No sé cómo, recordé algunas
frases que han intentado definir esa
potencia que invade los sentidos, cuando
el amor se atrinchera en los corazones, sin permitir que el desaliento, los
verdugones de la vida, y los harapos de la piel, dejen ver la realidad. Entre
ellas esta:
Amo como ama el amor. No conozco otra razón para amar que amarte. ¿Qué
quieres que te diga además de que te amo, si lo que quiero decirte es que te
amo? De Pessoa, Fernando.
Yo me digo algo similar ¿Por qué
amar a esa persona y no a otra? Porque es así, sin nada que lo sustente más que
el sentimiento que el que lo sostiene.
Cuando, con más alquimia que
ciencia exacta, se produce la simbiosis de dos latidos, la eternidad se queda prendida de ese instante. De forma independiente a la duración del
mismo. Porque es eterno en su durabilidad exacta.
Tampoco importa el devenir que
traiga la vida a los actores, ni el pasado que arrastren en su pies, porque la
potencia de lo vivido, permite un antes y un después. Dejando un poso a siempre,
que permite reconocerlo, por revivirlo, aún cincuenta años después.
Según me ha parecido.
Igual sí que como dice Lola, el
amor es pura literatura, y como tal, necesario para dar consistencia a la
existencia, o al menos, dotarla de un valor añadido. Como decía Stendhal quizás con razón Ir sin amor por la vida es como ir al combate sin música, como
emprender un viaje sin un libro, como ir por el mar sin estrella que nos
oriente.
Quién sabe lo que late bajo los
corazones almibarados de color rojo pasión, los días como hoy, en que la imagen
de Cupido nos obligan a hacer balance de
lo sentido... locamente.
La vida sin amor es vacía, no me imagino la vida sin ese sentimiento, es el que nos hace caminar, nos da energías, la vida sin amor es como un libro sin páginas escritas, como un jardín marchito.
ResponderEliminarPreciosa entrada en el día de los enamorados.
Un beso.
Nos permite caminar más ligeros, con mayor energía y más posibilidades de que la travesía sea a buen puerto.
EliminarGracias, María. y ya imagino qué pasó en tu blog. Debí comentar a una foto, lo que correspondía a uno de tus buenos textos.
Un beso. feliz día para ti
Por cierto dejaste tu precioso último comentario en otra entrada, en la de un viernes fotográfico, no pasa nada, pero lo único no sea que vuelvas a mi blog y veas que no está tu comentario en la última entrada, es por eso.
ResponderEliminarOtro beso, amiga Albada.
La literatura sólo es un fiel reflejo de nuestras vivencias, anhelos, sueños, deseos, esperanzas, proyectos......
ResponderEliminarSin amor no hay nada de eso.
Un beso.
Sin amor, entendido como el motor más poderoso, no hay nada. O nada que valga la pena emprender, recorrer, esperar, desear...
EliminarUn beso, Alfred. Un perfecto día de San Valentín para ti.
Los días como hoy permiten echar un vistazo a nuestro alrededor para darnos cuenta que sin amor no somos más que polvo del olvido.
ResponderEliminarUN SALUDO
El amor es en realidad lo que hace que nuestro paso tenga sentido. Lo que damos, lo que recibimos, lo que somos capaces de compartir desde el afecto.
EliminarUn saludo.
Definir el amor me resulta imposible.
ResponderEliminarEs una locura emocional que no dura mucho.
Si, ya sé que eso no gusta pero es lo que hay.
La gente lo niega, y bla bla bla.
Besos.
Es un desbarajuste hormonal tal vez en cierta edad. Una locura transitoria, o indefinida. Y en efecto, tratar de definirlo es como intentar hacerlo con la belleza. Se siente o no se siente. Poco más. O nada menos, quién sabe.
EliminarUn beso.
El amor tiene razones que la razón no comprende.
ResponderEliminarMe ha gustado tu reflexión Alba
Un beso
Si vamos a la búsqueda de explicaciones para cada sensación, nos quedaremos ahítos de ciencia, con la cabeza encendida, pero con los pies fríos. Te doy la razón.
EliminarUn beso.
Buscarle explicaciones al amor es tan ruin como contar el truco de un mago, si lo que nos da es tan bello, ¡qué tanta ciencia!
ResponderEliminarY sí, es pura Literatura... Ayer me preguntaba, cómo alguien puede leer ficción habiendo tantas historias reales para conocer. Fue una pregunta tonta, lo acaba de confirmar tu entrada.
Un beso grande.
HD
Buscar tres pies al gato...para qué. Vivamos y punto. Si la vida te besa en la boca, con ese gusto a sangre desbocada, para qué más.
EliminarEn la realidad, cualquier parecido con la ficción, es pura coincidencia.
Un beso grande, que las cortapisas y medidas las dejo para los científicos. :-)
Sí, claro, sentirlo ya es bastante, y no me pidas explicaciones... aunque yo siempre pienso en el enamoramiento; el que es tan intenso que no sirve razonar, como decía Ortega y gasset "nuestra conciencia se estrecha, empobrece y paraliza" pero el cuerpo...¡oh! es una maravilla lo que se siente.
ResponderEliminarUn beso.
Caramba...es que el cuerpo tiene sus propias leyes. Ahí, claro, todo es más explicable, comprensible, medible...
EliminarGracias por comentar, dando un punto de referencia a los sentidos tangibles, que las teorías, al final, es en la práctica donde se ratifican.:-)
Un beso.
El amor es complejo, define muchas realidades y muchos pensamientos. Por eso muchas veces lo convertimos en palabra hueca llena de ecos de desamor.
ResponderEliminarSaludos
Y qué verdad es. Adornamos los ecos de lo leído, vivido, sentido, en un vano intento de dar forma a un recuerdo, o espejismo, o una añoranza de lo no sentido.
EliminarUn cordial saludo.
Querida Albada me dejas pensando y repensando tus palabras...
ResponderEliminarHoy en día paso por un momento en que entre muchas otros interrogantes me digo a mí mismo:"¿Por qué amar a esa persona y no a otra?" o ¿Por qué no debo enamorarme de otra mujer? Una dualidad que me caracteriza.
Un beso sonoro va.
Cada día puede hacerse uno la misma pregunta, y cada día puede contestarse lo mismo. -¿Y por no a esa precisamente? , - ¿Y por qué sí debo o no debo enamorarme de...?.
EliminarNo entiendo mucho, pero anteayer el Papa, en su condición de nula experiencia (imagino), decía algo así como: No existe la mujer perfecta, ni el esposo perfecto...y añadió de modo propio...ni la suegra perfecta.
Seguramente el amor, siempre imperfecto, reside en no tener la necesidad de hacerse preguntas de esas.
Un beso grande.
El hombre lleva milenios haciéndose la pregunta: ¿qué es el amor? Sócrates y sus amigos conversaron y conversaron el tema, Jenofonte dice que en la corte del Rey Ciro también se debatía acerca de su significado. En las mil y una noches se cuenta como hombres y mujeres hablaban acerca del amor y su significado.
ResponderEliminarYo creo que el amor hay que vivirlo simplemente, no necesito saber que las estrellas "son un objeto astronómico que brilla con luz propia y que están formada por una esfera de plasma", me basta con que estén ahí, en el cielo, para contemplarlas y disfrutar su belleza.
No se lo que es el amor, solo se que amo y soy amado, y que, como dices, permite que un antes, un ahora y un después se conviertan en un siempre.
Es objeto de cualquier discusión, pero como dices, aun pudiendo diseccionar y contemplar las moléculas que integran la sensación, qué importa si se siente.
EliminarEl símil con el universo me pareció muy interesante, porque por más que sepamos o ignoremos sobre los cuerpos celestes y sus leyes, mirar el firmamento, en la noches estrelladas, nos produce el mismo placer y sensación de plenitud y pequeñez a un tiempo.
Un saludo.
Hay miles de definiciones del amor, pero cada uno lo siente de forma diferente, por ese motivo hay que dejar libertad para este sentimiento.
ResponderEliminarun abrazo
fus
Haya tantas como maneras de sentir. El concepto amor, va desde el universal, amplio y abierto a todo lo que nos rodea hasta la focalización en una persona. El respeto a la libertad de manifestarlo es imprescindible..
EliminarUn abrazo.
La complicidad, es la horma, donde encajan dos amores a medida, aunque sean nuevos. Besos amiga, siembras paz con tus plabras.
ResponderEliminarTu símil me resulta curioso, pero cuando pie y zapato son de piel, la complicidad hace que la adaptación sea perfecta.
EliminarSi no nos equivocamos de número!:-).
En serio, gracias por la lectura y por la sensación de sosiego que captas del texto.
Un abrazo, Aries