Atrás queda la playa, los juegos, el relax. El unicornio con arco iris se desinfla. Los cisnes rosas pierden el aire, casi siempre con la ayuda de brazos y piernas que se usaron antes en nadar por el azul del mar, o en hacer castillos de arena que, efímeros, nos regresan a la infancia. Los cuadernos, el trabajo, el gris de las rutinas regresan. Puntuales a la cita tras las vacaciones.
Añado que un estudio reciente concluye que tres semanas de vacaciones como mínimo, es más sano para la salud a largo plazo que los cambios en cuanto a adoptar hábitos saludables (dieta y ejercicio). Me hace pensar si no necesitamos volver a la infancia, en el contexto que sea, el de la lectura sosegada, en el de los viajes, sea a la montaña, al mar o en empaparnos de arte las pupilas. Se recargan las pilas. Buen regreso a todos ;-).
Creo que lo de volver a la infancia es algo vital.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz domingo.
Es lo que buscamos, regresar a donde fuimos felices, y en vacaciones, era cuando más libres y felices nos sentíamos.
EliminarUn abrazo
Volver a la infancia sería muy bonito, en invierno y en verano. Por aquí todavía sigue haciendo bastante calor, y eso que el tiempo anda con tormentas.
ResponderEliminarBesos Albada.
Por aquí hubo unas tormentas de campeonato. Sin embargo hoy estuve en Salou y las playas estaban llenas, y el sol hacía mella en la piel. En invierno se era feliz con juegos de mesa, deberes tras el cole y complicidad con los compañeros. Sin olvidar las castañas asadas en cucuruchos calentitos :-)
EliminarUn beso, Rafa y gracias por tu lectura
Un poco de verano, hace que todo el año valga la pena, dijo un corazón agradecido.
ResponderEliminarUn Abrazo va temblando de alegría como leve mariposa.
Un poco de verano, de risas, de asueto. Sin relojes, ni frío en las manos. Siempre es un gozo saberse vivo, jovialmente vivo.
EliminarUn abrazo que va, en este momento, envuelto en nubes oscuras, cuando la oscuridad va entrando de contrabando por las persianas.
Felicidades Albada, que comirnces con energia. Por aqui en el fin eel mundo todavia nos falta mucho para las vacaciones. Un saludo.
ResponderEliminarMariarosa.
Hoy en día no hay fin del mundo, querida Maria Rosa, sino las estaciones contrarias, así que las vacaciones y el calor llegarán, antes, seguro, de lo que imaginas hoy.
EliminarUn abrazo
Buen regreso.
ResponderEliminarUn abrazo.
Igualmente Macondo, que tu regreso a lo cotidiano no sea rutinario ni gris, sino alegre y plagado de sonrisas.
EliminarUn abrazo
El final del veraaanooooo.... y tú partiráaaaaaaaaasssssssssss....
ResponderEliminarBesos.
Canción de hace unas décadas y que puede repetirse cada verano :-)
EliminarUn beso
Todo lo bueno se acaba.
ResponderEliminarUn beso.
Lo bueno, esa libertad, ese no usar reloj se acaba, claro. El descanso anual sirve para reponerse, y está acotado por el tiempo.
EliminarUn beso y feliz lunes
Creo que digo adiós al verano y me vuelvo a la infancia con mi cartera nueva, mis lápices, mi plumier, mis cuadernos y hasta el uniforme, si es necesario.
ResponderEliminarUn abrazo para ti.
Ahora lo vemos así. Ese regreso al cole y los amigos como algo bonito. La realidad es que tanta y tanta ilusión no nos hacía :-)
EliminarUn abrazo
Sí, viene bien tener un descanso de al menos 15 días, para desconectar de todo :)
ResponderEliminarEspero que lo hayas pasado muy bien.
Muchos besos, Albada.
Esos descansos van sensacional, aunque no se salga del lugar donde uno reside. Implica un cambio de ritmo, un alivio para los relojes y las imposiciones.
EliminarDeseo que haya sido un tiempo precioso para ti. Un abrazo grande
Muchas gracias :) Un besote.
EliminarEs cierto: se cargan las pilas para todo el año y se retoman las obligaciones de mejor manera... los que tienen obligaciones.
ResponderEliminarBesos.
Las rutinas desgastan, el ánimo sobre todo, así que romperla, desconectar de ella unas semanas, es muy reconstituyente para retomarlas.
EliminarUn abrazo
Nada igualable a ser dueño de tu tiempo.
ResponderEliminarManejar los horarios al propio antojo.
No tener nada que hacer que no sea lo que nos apetece.
Mas que vacaciones a eso le llamo vivir.
Que menos que tres semanas al año.
Vivir sería eso, sin duda. No atenerse a horarios ni a imposiciones sería el estado de bienestar deseable. Sin embargo, fíjate, los parados que no pueden trabajar se enferman, claro que me imagino que que por las incertidumbres.
EliminarSer dueño del tiempo es un lujo que no sabemos valorar, ni siquiera cuando trabajamos, y es un error. Un abrazo
Deberíamos recurrir a la infancia con más frecuencia. No sabemos lo mucho que nos perdemos por no mirar y vivir, a veces, a través de esa mirada pura, nítida y despreocupada.
ResponderEliminarY completamente de acuerdo. Mente y alma necesitan al menos una vez al año esa recarga de energía, y reseteo para la vuelta a la rutina.
Un abrazo, y feliz semana, querida amiga.
Recurrir ala infancia, perfecto lema cuando los ojos se cansan de saber qué nos espera uno y otro día. De niños vemos lo posible, lo que no hace gozar.
EliminarDescansar de la rutina es terapeútico. Es la mejor inversión. Un abrazo grande
jaja, el planeta necesita de periodos de floración y de espera. El verano, con sus calores, pronto estará en el hemisferio sur, y nosotros estaremos con el abrigo. Son los ciclos de las cosas, la renovación periódica, la compensación que implican las estaciones.
ResponderEliminarUn abrazo grande, Julio David. Feliz martes
No vas a creer pero no me gusta nada el verano.
ResponderEliminarSerá que Buenos Aires es muy pegajosa y la gente se te acerca...y ahj
Quisiera vivir un verano en la playa, completo. Como cuando tenía tres meses de vacaciones en el colegio.
Un abrazo!
Esas vacaciones del colegio de tres meses son las mejores. La humedad de Buenos Aires seguro que hace que el calor haga sudar y sea muy pesado. Yo veo el inconveniente obvio al verano, que llega un punto en el que no te puedes quitar más ropa, cosa que en invierno, el frío te deja siempre la opción de otra capa más, como cebollas. :-)
EliminarUn abrazo
Este verano... tan distinto... tan extraño... tan largo... y ... buf... mejor no pensar en los meses que siguen, sino mejor pensar en la infancia, ella nos trae lo mejor, sin lugar a dudas.
ResponderEliminarBienvenida a la normalidad.
Besos enormes.
Hay veranos, o tiempos de ia vida que se hacen muy largos, porque implicaron una dureza anímica o física enorme. Como dices, cuando pasa ese tiempo hay que recuperarse todavía, resanar heridas, y volver a caminar.
EliminarBienvenida siempre. Un beso grande, dulce María
Hola Albada Dos , yo pienso que esto del estrés post vacacional , es cosa de lo acelerada que va la sociedad , ya que con eso de que tenemos que ser productivos y competitivos con nuestros competidores , ya no tenemos tiempo para estar con la familia , los hijos y vivir un poco más tranquilos , ya que parecemos conejillos de indias , esto esta es mi humilde opinión , pero yo creo que esto es así , te deseo una feliz mañana besos de flor
ResponderEliminarPensé que ya había pasado a verte , ya que últimamente se me acumulan las visitas.... ainssss señor , jjajajaja.
Sí, vamos estresados todo el año. Cuando coincide la vuelta de vacaciones con la entrada al colegio de los hijos, yo pienso que más que estrés post-vacacional es estrés por mochilas, libros, equipamiento para ellos, y los impostes de materiales lo que nos agobia más que volver al trabajo.
EliminarVamos como conejo de Alicia todo el día. Una pena poder disfrutar poco de las pequeñas cosas del quehacer diario. Un abrazo grande
Hola Albada Dos ya viste que soy de veranos y me resisto a dejarlo marchar, quizás sí es ese retorno a la libertad de la infancia o sobre todo ese disponer del bien tan escaso que es el tiempo y dedicarlo a aquello que nos apetece, cuándo y cómo nosotros queramos, lo importante como bien dices es disfrutarlo.
ResponderEliminarBesos de vuelta
No somos conscientes del tesoro que es ele tiempo. Es lo que nunca vuelve, así que disfrutar de los tiempos de goce es fundamental. Aquí tenemos un mes de vacaciones pagadas por año, y creo que es importante usarlo en realmente descansar sin relojes.
EliminarBesos, Conxita. Feliz viernes
Desconectar es tan necesario..., sobretodo porque vivimos en una rutina en la que hemos perdido completamente la pasión por lo que hacemos a diario.
ResponderEliminarSaludos!
ES cierto. Si lo que hacemos a diario nos siguiera motivando, nos siguiera llenando de sentido, no sería tan necesario.
EliminarUn saludo
El verano con ese calorcito y disfrutar de los días largos en la playa, el campo o simplemente bajo una sombra en un parque es muy agradable. Ya ha llegado el otoño y es una estación para disfrutar de los colores que tienen, los arboles de verdes se vuelven rojizos ,ocres y amarillos. Se caen las hojas que forman paisajes alfombrados multicolor. Abrigarse un poco más y disfrutar de esos paseos por el monte. Un abrazo.
ResponderEliminarEs una época muy bella. Aún no hace frío de verdad y los bosques se visten de paletas imposibles en los follajes. El verano nos deja esos instantes de mar y de sombras deseables, pero el otoño tiene un encanto indiscutible. Intentaré ir a Ordesa en unas semanas, y espero llenarme de colores ocres, y rojos, y amarillos.
EliminarUn abrazo