Sus deseos de comprarlo todo en Marte se hicieron realidad. El viaje por el viejo Oeste, esa América profunda, recorriendo parajes difícilmente imaginables, había sido una especie de peregrinaje por un impulso. Para encontrarse a sí mismo, se había dicho. De nada sirvieron los consejos de que fuera muy bien preparado, porque el desierto, que pareciera marciano, era inclemente.
Tras caminar dos días, alucinando por la insolación, sin saliva en la boca ni señal de cobertura en el teléfono, el autoservicio con gasolinera, Marte, fue su oasis. Podría comprar de todo, salvo la cordura, ya perdida del todo
Muy bueno, no se puede comprar todo es la moraleja que nos dejas. Un abrazo
ResponderEliminarNi con tarjeta de oro, ni con la black :.)
EliminarUn abrazo, Ester, por un lunes estupendo
Es que hay gente que se mete en cada desierto...
ResponderEliminarBesos.
Igual son impulsos raros. A mí un desierto...como que no me llama
EliminarUn abrazo, Juan L.
No me extraña la falta de líquidos en su cuerpo le ocasionó la locura. Un buen micro.
ResponderEliminarBesotes y feliz semana!!
La deshidratación extrema es muy mala, ya lo creo. Pero reconocer que hay cosas que no se compran, es algo que deberíamos aprender sin extremos :-)
EliminarUn abrazo, y feliz tarde, guapa
¡A quien se le ocurre meterse en el desierto sin ir bien pertrechado de todo!.
ResponderEliminarAbrazos.
A un temerario, que lo paga caro, me temo :-)
EliminarUn abrazo, Conchi
Maravilloso microrrelato.
ResponderEliminarPodremos tenerlo todo, pero no hay que olvidar que lo más importante es la cordura, no tiene parangón.
Cariños.
kasioles
La cordura es un regalo, eso es lo que no entendemos, o la salud. Nos obcecamos en comprar, lo que puede no tener precio :-)
EliminarUn abrazo, a y por una tarde bonita
¡Es buenísimo!¡Menudo giro ha dado el relato en un segundo! Un placer leerte.
ResponderEliminarBesos, Albada
El desierto, que parece marciano, y nos enloquece :-)
EliminarUn abrazo, y muchas gracias
Muy bueno.
ResponderEliminarDe la angustia a la locura.
Besos.
No sé que es peor, ¿eh?
EliminarUn beso
Aseguran que el desierto, en general, es un buen lugar para encontrarse a sí mismo, o perderse.
ResponderEliminarUn abrazo cumpleañera.
Me creo que perderse. encontrarse, pues también, pero esa soledad extrema..no me apetece nada.
EliminarUn abrazo desde aquí, tras soplar las velas.
Seduces desde la primera frase; a mí se me antojó que algo iba a suceder en el planeta Marte; y plis plas nos llevas caminando casi con la boca seca hasta el destino del microrrelato.
ResponderEliminarUna idea genial.
Enhorabuena y feliz tarde de lunes.
Un beso.
Bueno, la frase no la eliges, pero qué haces con ese inicio...sí, y ahí está la gracia :-)
EliminarUn abrazo, y me alegro que te gustase. Por una bonita tarde
Tan real como la vida misma,
ResponderEliminarcuando se pierde la cordura.
Besos
Ya te digo. Le imaginé huyendo de algo. Pero lo suyo fue Un locura :-)
EliminarUn abrazo, y tarde bonita te deseo
Esos finales son la guinda...
ResponderEliminarUn abrazo y feliz semana.
Me gustan así :-). Gracias.
EliminarUn abrazo, Rafael
Para irse a Marte hay que tener un grado de locura. Muy buen micro Alabada.
ResponderEliminarUn beso dulce y dulce semana.
A ese marte del firmamento aún más, y hay cola. No entiendo mucho el afán.
EliminarUn abrazo, Dulce
Ni yo lo entiendo, considerando que ya tenemos un planeta y muy bonito en el cual vivir, para qué ir a otro a contaminarlo de la misma manera. Pero el hombre es conocido por su ambición.
EliminarOtro beso dulce.
Su afán es infinito. Y así nos va. Con un planeta tan hermoso, ya eran gabas.
EliminarUn abrazo, Dulce
Hola Albada. Se dice que Quien cambia felicidad por dinero, no podrá cambiar dinero por felicidad.
ResponderEliminarUn abrazo.
Es que son conceptos diferentes. Aunque hay quien crre que la felicidad se compra.
EliminarUn abrazo, y una tarde gozosa para ti
Los hay zumbaos, desde luego.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues más de los que uno cree.
EliminarUn abrazo, Macondo
Hay de todo como en botica, Albada. No es de extrañar que haya tanto tarado suelto.
ResponderEliminarEstupendo micro y muy jocoso por cierto.
Abrazos con cariño y buen comienzo de semana.
Un poco de humor nunca estorba. Ojalá tu semana sea gozosa, cargadita de buenos ratos.
EliminarUn abrazo, y a por una noche amable
Qué bueno Marte su Oasis.
ResponderEliminarMuy buen micro, ójala gane, me gusta leerte así en micros.
Besos enormes.
No, ni seleccionado, jaja, pero ya es la tónica :-)
EliminarMe alegro que te gustara. Un abrazo grande, grande. Porque tu noche sea de luna con miel
Tremendo micro que va in crescendo hasta acabar en la locura.
ResponderEliminarMe ha encantado, esa sensación de sed,de alucinación,de desesperación.
Muy bueno!
Un beso grande!
Es cortito pero da opción a escalar cotas, aquí, de ansiedad :-).
EliminarMuchas gracias, Luna. Un abrazo grande, y a por una noche con buenos sueños, nada de marte o marcianos :-)
aahh vale, que algunos paisajes desérticos de américa se parecen a marte! yo te leía hablando del planeta marte y de los americanos, y ya pensaba: "hay que ver, el afán colonizador de esta gente está llegando muy lejos!". ;)
ResponderEliminarabrazos!
Jaja. Pues también. Son colonos por tradición. Paisajes así, en pequeño, hay en Tenerife también. Sólo pensarlo da sed:-)
EliminarUn abrazo, Chema
Boa tarde Alba, a viagem para Marte será somente de ida.
ResponderEliminarSin vuelta, es verdad :-)
EliminarUn abrazo, Luiz
¡Metiste la frase!
ResponderEliminar;))))
Un beso.
Pues ta ves, con calzador.. Un beso
EliminarNo todo tiene precio, y hay cosas que se pagan muy caras…
ResponderEliminarMuy bueno, querida amiga. Con un buen y contundente final. Me ha gustado mucho.
Abrazo grande, y muy feliz semana 💙
Pues no. La cordura, es este caso, no yendo a Marte, planeta o supermercado :-)
EliminarGracias. Vamos a encarar la noche, y esta nueva semana. Un abrazo enorme.
Muy bueno, Albada... la cordura no es canjeable. Te felicito, me ha gustado mucho.
ResponderEliminarMil besitos para ti y muy feliz noche ♥
No, la cordura cuesta de poder sacársela con dinero :-)
EliminarGracias. Un abrazo grande, y vamos a por un bonito día
¡Hola! Espléndido microrrelato, gracias por compartirlo. Un saludo.
ResponderEliminarMe alegra que te haya gustado, Carolina.
EliminarUn abrazo, y feliz martes
Hay cosas en la vida que no se
ResponderEliminarpueden transferir, me agrado mucho
y el final buenísimo.
Besitos dulces
Siby
Esos sueños llevados acabo, de tal manera, vaya pesadillas acaban siendo.
EliminarUn abrazo, y a por este día
Hay cosas que ni con todo el oro del mundo se pueden comprar. Un relato para reflexionar amiga, que tengas un lindo día, saludos y abrazo.
ResponderEliminarPues sí, la Visa para todo lo importante no sé si sirve :-)
EliminarMuchas gracias, Sandra. Un abrazo
Un microrelato que con pocas palabras dice mucho. Y deja un aprendizaje como en las fábulas. No hace falta ir tan lejos para encontrarse a si mismo. Nis tenemos cerca!
ResponderEliminarNi tan lejos, , ni tan mal, ni dejándose la cordura por el camino :-)
EliminarGracias. Un abrazo, y a por un martes gozoso
No sé quién dijo "no descubras mundos nuevos..." Hay experiencias que más vale no probar, sobre todo si uno no está preparado adecuadamente. Menos mal que al final Marte le salvó de la inanición, aunque no le devolviera la cordura, aunque quizá ya no estuviera cuerdo del todo cuando tomó esa decisión, je,je.
ResponderEliminarUn abrazo.
Le salvó en tiempo de descuento. Sin tener un problema en Houston, que tal vez se buscó él mismo :-)
EliminarUn abrazo, Josep Mº
Estupendo microrelato. He leido tu libro Besos Usados en ilera. Por cierto muy buenos todos los relatos. Me ha encantado.
ResponderEliminarUn abrazo de esperanza con el deseo de que acabe pronto esta pesadilla de la pandemia.
Muchas gracias. Me alegra que te gustara. Son relatos medio románticos, con finales diferentes.
ResponderEliminarUn abrazo enorme , y porque este tiempo de virus nos dé tregua
No todo se puede comprar con dinero...y en ese caso la locura pudo más.
ResponderEliminarUn abrazo enorme Alba
Aquí ese sol tras el impulso, tuvo demasiada intensidad.
EliminarUn abrazo grande, y feliz noche
Comprarlo todo, es lo que nos ha llevado a esta falta de juicio, de llenarnos de chatarra y basura, que ahora se podra comprar desde Marte. Un abrazo. carlos
ResponderEliminarExacto. Necesitamos más espacio, en el espacio exterior por haber consumido tanto que agitanis la capacidad del plabera azul.
EliminarUn abrazo, y bonita noche te deseo
Hay que tener cuidado con esos viajes al interior (de uno mismo) pueden hacer que compres compulsivamente.
ResponderEliminarSe dice también de ir al supermercado con hambre... jajaja
Besos.
Claro, es mejor tomarse esos viajes con filosofía, y no con impulsividad. Sí, ir a comprar con hambre es llevarse chorradas seguro :-)
EliminarUn abrazo, Laura. Por un bonito día
¡Hola, Albada!
ResponderEliminarTe quedó muy bonito, personalmente lo comparo con la realidad que vivimos todos hoy en día. Muchos ya estamos súper estresados... Y yo que había pensado comprarme un terrenito en Marte. Jijiji
Un fuerte abrazo. 🌷😘
Demasiado stress, eso es seguro. Los terrenitos en Marte estarán muy caros, pero a saber si hay que irse tan lejos :-)
EliminarUn abrazo, y por un día fantástico
Escalofriante, me has traído a la mente el posible futuro.
ResponderEliminarBuen micro.
Un abrazo estimada amiga Albada.
No sabemos si un Marte planeta será un nuevo hogar, de momento en este nos falta humanidad.
EliminarUn abrazo enorme
Caminar sin descanso, para salvar la vida y perder la cordura.
ResponderEliminarUn camino como la vida misma.
Un abrazo.
No sé si más de uno no están en ese camino de autodestrucción. No puedo saberlo, pero a veces creo que sí.
EliminarUn abrazo, Ángel
Fantástico relato. Lo percibo como una alegoría de la vida.
ResponderEliminarFelicidades
Un beso enorme
Em el fondo, lo es. Una moraleja en medio de un paisaje.
EliminarUn abrazo
Qué estupendo relato ALBADA DOS !! Nos remite a ciertas realidades que viven algunos Países sudamericanos caídos en el poder de seres que han perdido la cordura y lo cierto que en esos territorios se suceden hechos protagonizados por seres portadores de la mayor malignidad.
ResponderEliminarEs una pesadilla global. Por el virus, que sólo faltaba que lloviera cuando sobre mojado, y por la tendencia universal a olvidar a quienes no son primer mundo y los bien ubicados en él.
EliminarPorque sepamos que "los otros", somos nosotros también. Porque sepamos ponernos en la piel de los demás. Un abrazo
Curioso relato. Parece que su protagonista va por la vida muy ansioso, nunca termina de estar satisfecho y siempre necesita más.
ResponderEliminarTiene su moraleja, sí!
Muy bueno, Alba.
Desear sin límite, a veces es quedarse muy vacío, y de verdad solo.
EliminarUn abrazo, y vamos a por este día, con ganitas
Lo fue a su manera, por poco tiempo, pero sí.
ResponderEliminarUn abrazo, y feliz día
Qué Bueno Alba, me egarró el final, incluso pretendiendo acortarla, la escena es vívida. Plash, plash. Un beso
ResponderEliminarEs vivida, pobrecillo. Acaba peor que otros viajes al interior.
EliminarUn abrazo, y feliz tarde