Quiero
cabalgar tus ansias,
revelarme
a la rutina
dejar
atrás los pasados,
desatar
mis ataduras.
Cabalgar
amaneceres,
acoplarme
a tu cintura,
ser
aliento de tu boca
ser
tu hembra y tu locura.
Desovillar
las ausencias
salir
de los laberintos
aferrarme
a la emoción,
sacar
al sol mis instintos.
La
luna, asomando presta
me
deja el recuerdo exacto
de
sentir que me moría
derretida,
entre tus brazos.
Un bello poema de amor, pasional, real. Hay una especie de sensualidad muy suave, que permea todo el texto. Muy bien escrito.
ResponderEliminarLa evocación me gusta cuando se habla de amor.
EliminarMuchas gracias. Un abrazo
Hola Maripau, leerte es una delicia, oírte ya es sublime. Una preciosidad de poema.
ResponderEliminarHace mucho que no sabía de ti, me has dado un alegrón.
Yo estoy intentando salir de un mal trance. Tengo perdidos a dos seres queridos en la Dana de Valencia, es tan duro como doloroso, como a otros cientos de españoles, lo peor, que sus muertes no han sido naturales. De haberse construido el embalse proyectado y aprobado desde 20009 y que estaba ya iniciado, no habría ocurrido esta tragedia dantesca. Eso y permitir algo gravísimo: edificar y mucho en terrenos altamente inundables, prohíbido pot ley.
Un beso.
Bienvenida de nuevo.
Tan bonito leído como escuchado, a ternura y la pasión se unen para versar un deseo. Abrazos
ResponderEliminarDe sutil erotismo. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarNota bene: estupenda voz.
ResponderEliminarMe gusta leerte , pero más escucharte, ese énfasis hace que el poema se sienta mucho más.
ResponderEliminarUn besote grande.
Versos con una gran intensidad.
ResponderEliminarAbrazo.