DESENVOLVIENDO EL DÍA
El sol despertaba con sigilo.
Aparecía con parsimonia.
La playa reflejaba colores marinos,
tornasolados y brillantes.
Mientras yo me peguntaba
qué me depararía el día.
Qué aromas a sal y vida
rodearían mi mirada.
Caminé dejando huellas
que cualquier ola borrará,
como tantas cosas que hago,
que duran lo que dura el instante.
Ese pie en cada paso,
esa efímera huella de mi voz,
es lo que soy, y nada más.
Llevo abiertos los sentidos, por si acaso.
Un albatros surca el cielo,
Un velero en lontananza
me recuerda lo que amo,
mi ilusión de navegar.
Desenvuelvo el día como lo que es,
el regalo de vida que se me otorga,
los planes que pocas veces hago
dejando que la brisa me lleve, sin más