Cuando los vecinos
llevaron al perro, ella aceptó, sin pensar que temprano en la mañana, se
disfrazaría de elfo musa para ir a trabajar.
Con las compañeras
de planta, la suya tan peliaguda, harían el turno de cuidar a los niños ataviadas de cuento. Harían competiciones de risas con los pacientes más
animados y leerían cuentos a los más graves, por llevar la alegría abrochada en
tus talles.
Vestida con antenitas
llamó a la vecina, le devolvió a Yoko, se montó en el metro y llegó a Vall d’Hebron
rodeada de princesas con sueño en las pestañas. De piratillas de parche en el
ojo y misterios por descubrir, de hadas con alas plegadas en bolsas de Ikea, de
indias y americanos, de mamás retocando peinados y plumas, zapatillas y espaditas
de plástico.
Junto a la gente
que iba hacia el trabajo vestidos de día laboral, ella, algunas madres y casi
todos los niños, engalanaban el aire con sabor a carnaval sin comparsas, al son
de un convoy que olía a Cola cao y nervios, a dicha y a regaliz. Una fauna y
flora de caras de alegría, de impaciencia o de sueño infantil, se empeñaban en
recordar que era carnaval para todos, también para los niños del hospital.
una idea muy alegre para celebrar el carnaval.
ResponderEliminarfelicitaciones
En las plantas de pediatría se busca aliviar a los niños, con todas las tretas al alcance de la imaginación.
EliminarGracias por valorar la iniciativa. Un saludo
No puede haber algo más bonito.
ResponderEliminarNi mejor.
Mi aplauso para todas.
Besos.
Es un colectivo que se deja la piel a tiras por la sonrisa de un niño. Son formidables, inmunes al desaliento, y merecedoras del mayor reconocimiento.
EliminarUn beso
No hay nada más triste que un niño en un hospital. Cualquier detalle por arrancarle una sonrisa es emotivo y digno de admiración.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hay hasta payasos, especializados, formados, especiales digamos, en San Juan de Dios, hospital infantil. Porque todos entendemos lo triste que es ser niño y vivir por un tiempo en una cama de hospital.
EliminarUn abrazo
Una gran labor la que realizan para conseguir una sonrisa de un niño enfermo. Un gran aplauso, se lo merecen!!
ResponderEliminarEstoy contigo,por completo. Se merecen aplausos y el trato más considerado por parte de administración. Las familias ya suelen valorar su labor.
EliminarUn beso
Preciosa iniciativa, me uno a los elogios de los comentaristas y como no a tu bonita aportación para difundirla. Un beso.
ResponderEliminarLas plantas pediátricas son de aquellas donde se nota la vocación del personal que atiende a los niños. Inventan lo imposible para disminuir el dolor, para buscar la sonrisa, para intentar que el niño, en lo posible, se sienta bien
EliminarUn beso
un placer siempre
ResponderEliminares
el Leerte