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miércoles, 16 de diciembre de 2020

Tarta de chocolate en jueves

 


Siguiendo la propuesta de Lugar de encuentro, sobre DULCES, mi aportación es la que sigue. Lamento no saber hacer repostería. Y que el texto nada que ver con receta culinaria alguna. 

Invité a un escritor insigne y laureado. Me dijeron que no tenía hambre jamás. Que se alimentaba de yogurt con miel, besos con frutas y algunas flores de lluvia, pero preparé, por si acaso, una tarta sencilla de chocolate. Se presentaba así, diciendo que era frugal en sus comidas, ligero y etéreo como una pompa de jabón, con más espíritu que presencia, y más literatura que física. La verdad es yo no diría que comiera poco.

Con los postres, mi tarta simple, me pidió un carajillo de Baylis, y unos aromas de lujuria, en dosis homeopáticas. Ante conceptos tan vagos le eché un poco de más de licor en el café. Con los efluvios espirituosos su mirada de tenor venido a menos, se transformó en miradita de toro en celo.  Con los destilados pude comprobar que sus musas revoloteaban en pos de altos designios de locura poetizada, menos castas que las que ahora puedo nombrar.  La verdad es que, si bien parecía inofensivo en estado de normalidad, se le nublaba la carne cuando destilaba sus poemas, persiguiéndome por el salón. Con vergüenza ajena y ganas de echarle, le pude mantener quieto,  más o menos en un rincón, entre un ficus y la tele.

Fuera de sí, de no, de este y de oeste, y hasta fuera de aquel eje en el horizonte que se llamaba Estambul, no cejaba en intentar tocarme. Porque con versos hechos de cantos de sirenas, se le llenaba la boca de agua, de burbujas y de chocolate de mi tarta. Al final de los finales, era un bluf de poeta que sonaba a globo desinflado cuando el alcohol le desataba la lengua y los instintos. Le había invitado para hablar de mi novela, y había cocinado, raro en mí, un postre y todo, pero cuando le escuché roncar en la siesta, me dije que el insigne literato, era un hombre con más brillo que sustancia, y ya pude seguir escribiendo mi nueva novela, con el ruidito rítmico de su digestión. Le eché una mantilla por encima, no se resfriases el premiado escritor.

Por la noche, la tarta de chocolate, con un café con leche, me serviría de cena, más que sobradamente. Él, imaginé, cenaría con alguna escritora joven abriéndose camino hacia la fama de las letras por pagar.

Palabras 386


88 comentarios:

  1. Parece que todo acabó bien para los dos.
    Una con la novela y el escritor con la tía buena.

    Besos.

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  2. Vamos que no era tan encantador, menos mal que al menos esa rica tarta tuvo un final feliz. Una dulce noche .
    Besos!!

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    1. La tarta aguantó a la literatura, y los oropeles, ajenos :-)

      Un abrazo, y feliz día

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  3. Hola Albada.. La verdad es que todo lo bueno, si rascas un poco, no es tan bueno. Espero que sus libros por lo menos valga la pena..
    Un abrazo.

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    1. Espero que algún día sea juzgado pro su literatura, y no por sus redes :-)

      Un abrazo, y vamos a por este jueves

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  4. No es una receta pero el producto final deja un buen sabor de boca, muy lúdico relato hasta "cocina" y si es dulce, mucho mejor :)

    Un beso dulce.

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    1. jaja, me lo pasé en grande escribiendo, cosa frecuente :-), y es lo que vale.

      Un abrazo, Dulce

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  5. Dispuesta a disfrutar de tu escritura, con calma para no perderme las pausas ni las comas pero una carcajada ha servido de acompañamiento a "me pidió un carajillo de Baylis" y ya no me podido quitar la sonrisa. te agradezco el ratito prestado y te felicito. Abrazos

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    1. Es que disfruto, Ester, y quise poner un episodio inventado, con la mayor jocosidad posible. Es que los oropeles a mí no me deslumbran :-)

      Un abrazo, y a por este día

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  6. Ameno relato y algo accidentado por el alcohol, Albada. Te felicito, me ha gustado mucho leerte.

    Mil besitos y muy feliz noche ♥

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    1. Muchas gracias. Hay quien presume de lo que no es, pero hay que sonreír, e inventar situaciones cómicas.

      Un abrazo

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  7. Sigues dejándonos relatos y encuentros que me sacan una sonrisa. Gracias.
    Un abrazo.

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    1. Es que sin humor, ya me dirás qué es la vida, un erial, amigo.

      Muchas gracias. Un abrazo

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  8. me ha molado lo de "fuera de sí y de no". :D
    somos humanos de carne y hueso, es inútil ir de espirituales o de etéreos. si un poeta de estos que está en su nube se zampa una tarta o se pimpla varias copas, dices "mira, tan espiritual que era!". pero en cambio si un tío/a con los pies en el suelo que no va de nada, como que se lo perdonas más.
    abrazos!

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    1. Ahí iba a parar, que al final todo el peso de los oropeles, se queda en nada. Y sí, lo de fuera de sí, y de no, era un juego, claro.

      Un abrazo

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  9. Se saco de encima un pesado y pudo seguir con su obra.

    Un beso.

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  10. Con ver la imagen me ha entrado ganas de preparar una torta de chocolate ajaja.

    Besos♥

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  11. Boa noite Alba. O relato foi maravilhoso. Espero um dia ver essa literatura aqui no Brasil.

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    1. A ver, igual lo tenéis en Brasil, al pesado, a quien narra lo veo más difícil :-)

      Un abrazo

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  12. Genial relato, Albada:

    Es que el acoso florece en los más variados ámbitos.

    Un beso enorme

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    1. Se da en muchos ámbitos, esto era un juego, por supuesto, pero existe.

      Un abrazo, Ana

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  13. Ay que maravilla!!! Muy bien escrito y gracioso

    Paz

    Isaac

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    1. Es que sonreír es siempre un gozo, y sonrío escribiendo casi siempre.

      Un abrazo, Isaac, y gracias

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  14. Que original y fantástico relato amiga, me encanto, saludos a la distancia.

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  15. Que buen relato..!!!
    Saludos(y ahora quiero tarta!

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    1. Te la regalo, porque no sé cocinar. Bueno, no me pongo a ello :-)

      Un abrazo

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  16. Inesperado final, me gustó, contundente.

    Besos.

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    1. Eso de las recetas de cocina, es que lo llevo mal yo :-)

      Un abrazo

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  17. La estrella fue la preparación del postre y las sensaciones, lo demás una anécdota olvidable de un hombre común. Lindo relato, saludos!

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    1. Anécdotas que no van a ningún lado, por otro lado. Esta, de hecho, es inventada, por supuesto

      Un abrazo, y feliz tarde

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  18. Y a mi que me derrite el Chocolate, es mi vicio. Pero prefiero comprar la tarta a tener que hacerla, no me gusta cocinar.

    Qué buen humor nos deja tu relato.


    Te deseo una Feliz Navidad y Prospero Año Nuevo.

    Besos enormes.

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    1. Pues ya somos dos, eso de los delantales no me ha ido nunca, y ya es tarde, creo.

      Por unas fiesta navideñas diferentes pero cálidas, con amor en cada pestañeo. Un abrazo grande, María

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  19. Entre dulces y letras, lo mejor es no empalagarse y dejar decantar los vicios: en repostería como en literatura, dañan los excesos jeje. Original relato

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    1. Todos los excesos son malos, en la literatura también, el exceso de palabras, por ejemplo :-) que no conllevan mayor riqueza a la obra.

      Muchas gracias. Un abrazo grande, y por una tarde excelente para ti

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  20. El brillo de la fama, no hacía más que ocultar a una persona corriente y un poco mal educada.
    De cena, un café y un trozo de tarta, que buen plan.
    Un saludo.

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    1. Hay oropeles que apenas dejan ver lo que late debajo, a veces, la gran nada :-)

      Un abrazo, Ángel.

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  21. verdaderamente apetecible y con esos ingredientes no hay quien se resista, Y ve el capitán pirata
    Cantando alegre en la popa
    Asia a un lado, al otro Europa
    Y allá a su frente Estambul...
    todo un barco pirata cantando glosando tus preparados
    Un ab razo

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    1. Amigo, es que hay que estar al caso, como tú, para apreciar los sabores de la poesía, que se infiltraban en mi texto :-)

      Un abrazo, y vamos a por una tarde gozosa, y dulce, si se deja.

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  22. Ya se ve que en esta vida no es oro todo lo que reluce, y hasta los que brillan con fuerza tiene sus pequeñas y grandes miserias.Muy buen relato.
    Un abrazo

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    1. Claro, al final todo los humanos, por laureados que sean, son eso, seres humanos con sus miserias, y talentos, claro.

      Un abrazo, Rita

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  23. Sensacional toda la descripción; un goce de lectura; divertida, ingeniosa e inspiradísima. Te felicito.

    Un abrazo

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    1. Pues salió a vuela pluma, como casi todo lo que aquí publico, pero me divertí imaginando, y creo que eso es lo que captas.

      Un abrazo, y muchas gracias.

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  24. Ay, qué peligrosos los aromas de lujuria; ¿no te pasarías con las dosis? No me cabe duda de que los poemas suelen ser muy acosadores. Pero al menos se les puede detener con facilidad. Divertido relato, desde luego.

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    1. jja, los poemas y los poetas pueden ser acosadores, pero sólo si son malos de narices :-)

      Me divertí escribiendo, claro. Un abrazo

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  25. Muy bella y dulce entrada, lo que más se me antojo fue el Baileys es mi bebida favorita. Te mando un beso

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    1. Hay quien lo pide porque el resultado parece café con leche, y es dulce, así que puede ser una bebida estimulante.

      Un abrazo

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  26. Creo que no dejaría nada de este menú. Si con solo escribirlo me despertarse las ganas como decimos por aquí de la congargalla al mofle. Un abrazo con aprecio. Carlos

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    1. jaja, pues como aperitivo, luego ya te pones a la mesa y que pones hasta as trancas de tu manjar favorito :-)

      Un abrazo, y feliz día

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  27. jajaja una entrada de rechupete. Y el insigne y laureado escritor, se dejo ver en su esencia más pura. Menos mal que pudiste echarle la mantita.
    Genial relato.
    Besos.

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    1. jaja, me pareció un detalle muy tierno, porque quedaba desnudo en lo principal :-)

      Un abrazo, y gracias, Carmela

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  28. Al final todo se colocó en su sitio...la tarta de chocolate aguantó todo el relato, el que no aguanto la envestida fúe el escritor jajajaja.
    Gracias por las risas, amiga.
    Besos cariñosos.

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    1. jja, no aguantó, pero igual fue el alcohol, quién sabe. Por las tirtas de chocolate, que salgan buenas duren

      Un abrazo y gracias.

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  29. Eso de ir a consultar a un admirado escribir y encontrarse con un repugnante baboso tiene que resultar un verdadero chasco. Tú lo has contado con mucha gracia.
    Un abrazo.

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    1. Ha de ser un fiasco total. Segur existen, por cierto, aunque aquí es ficción totalmente.

      Un abrazo, Macondo

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  30. Anda que sera verdad eso de que las apariencias engañan, mira tu con el "frugaz"...Muy bien escrito, besos.

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    1. Presentarse tan etéreo...es que ya sería muy chocante. :-)

      Un abrazo

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  31. No soy muy goloso del chocolate, pero al ver la risa que produjo esta receta inventada, me voy a comprar una entera a ver si esos efectos son un chasco o un verdadero elixir. Estupendo relato, Albada.

    Abrazos con cariño y feliz Nadal !!!

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    1. jaja, a por la tarta, no sea que lleve algo y nos haga volar, como las nubes etílicas :-)

      Un abrazo. Felzi Navidad, amigo

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  32. A mi me has hecho reír por demás, y que bien!! Digo que bien que le has echado algo a esta receta, que no nos has contado. Porque me entro como la magia del ensueño, o lo dulce ha venido con algo espiritosos.


    un abrazo :)

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    1. Entre los ingredientes, pudiera ser que llevara alguna cosilla, pero le caló demasiado al tipejo:-)

      Un abrazo, y por un día bonito

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  33. Si es que siempre han dicho que no se puede mezclar, chocolate con poesía. Y encima bañarla con alcohol...que se desata una pasión turca que no veas. Aunque al final el toro acabe como un bebé, plácido, echando una siesta.
    Qué buen relato.
    Besos y chocolate

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    1. Esa pasión que algunos llevan muy subcutánea, porque hay quien se desnuda, pero de verdad, con poquita cosa.

      Por el chocolate, que me pierde :-) Un abrazo

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  34. El carajillo de Baylis transformó al escritor en pulpo... jajaja!! Gracias que la modorra de sobremesa acudió en tu rescate :)
    Muy divertido
    Bss.

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    1. jaja, me alegro que te hiciera sonreír. El alcohol no es buen consejero :-)

      Un abrazo, y feliz día

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  35. No, de recetas yo sé poquito :-)

    Muchas gracias. Un abrazo, y felices fiestas

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  36. Resultó ser un fiasco petulante, a quien sólo le interesaba medrar... en varios campos.
    me ha gustado equivocarme al pensar qye nos ibas a dar una receta, mucho mejor esta historia.
    Besos

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    1. Amiga, es que hay de todo en la viña del Señor :-). No, cocino muy poquito, no me arriesgo a destrozar las recetas.

      Un abrazo, Tracy

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  37. Muchas gracias por tu aportación al blog

    muchos besos
    Felices fiestas

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  38. Jajaja muy bueno!!.. me hiciste recordar que aunque me gusta cocinar no soy tan buena haciendo postres... me falta mucho para llegar a ser buena, te mando un abrazo grande

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    1. Yo de cocinar, como que poco. Por eso cambié el tema:-)

      Un abrazo grande

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  39. Maravillosa ALBADA !! En algún momento de nuestras Vidas acaso vislumbramos a alguien así, pero ni en sueños le permitiríamos ingresar en nuestro santuario.

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    1. Yo así de baboso no me he encontrado, pero no deseo encontrar, la verdad.

      Un abrazo grande, y muchas gracias feliz Navidad

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  40. Los escritores insignes y engreídos no son más que humo que se deshace al primer soplo. Ahora bien, tienen unos gustos tan refinados que no parecen humanos.
    Un abrazo.

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    1. jaja, tan finolis, que parecen de otro mundo, es cierto.

      Por la simpleza. Un abrazo

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  41. Que ingeniosa ... esta "receta-historia" me ha gustado mucho. Feliz Navidad .

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    1. Poca receta, me temo. Un abrazo grande.

      Feliz Navidad, Chelo

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  42. Una excelente manera de descubrir a quien parece pero no es. Excelente inspiración para un tema tan dulce. Gracias por participar. Feliz Navidad

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    1. Ha sido un gusto. Nunca mejor dicho. :-) sin saber de cocina, opté por la tangente. :-)

      Un abrazo grande, y feliz Navidad

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    2. Genial! Tiene sorna, gracia... lo tiene todo. Muy bueno! 👏🏼👏🏼👏🏼👏🏼

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    3. Bueno, es que hay situaciones cómicas desde fuera, como lo imaginé.

      Un abrazo, y gracias!

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  43. Me has recordado a un escritor al que admiraba muchísimo y en un curso de verano me lo encontré un tanto bebido... tu relato, genial. Y el chocolate, ummmm, que delicia!!!
    Besos

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    1. jaja, para que se vea que el alcohol no es bueno :-), pero el chocolate sí . Me alegra que te haya gustado

      Un abrazo grande, y feliz navidad

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