Imagen de Aguirrefotox |
La manecilla está varada como barca desfondada. Sueña con deslizarse al otro lado del reloj, con ese corazón de porcelana china enquistado. Abre su puerta y mira hacia la calle de los ayeres, por donde el hombre de su vida se escapó una noche, y por un momento cree ver su silueta, alta y desgarbada.
Sus latidos trastabillan, sus ojos se empañan de una espesa niebla. Sus pies esbozan pasos desbocados, y su mente la transporta a una era y a una enagua manchada. Desde el suelo escucha la voz del viento, que aflojando su quejicosa presencia, semeja un cantar de amor dormido, y ya, sin pulso se deja acunar por un sueño. El sueño de los vencidos
Bach a cualquier hora
Bach a cualquier hora
Triste el sueño de los vencidos. Hermoso texto.
ResponderEliminarBach siempre Bach, pero a YoYo Ma lo encuentro un tanto efectista :)
Un beso.
Hay chelistas que no gustan y los que hay que parecen estar de moda. Cuando el tiempo parece congelado, parecía que un texto cargado de nostalgia y espera baldía era lo que combinaba
EliminarUn beso
Tus letras llevan y transforman la imagen pero es ahí, en Santillana del Mar, y con la Colegiata al fondo, lugar encantador y lleno de magia, como tus letras.
ResponderEliminarUn abrazo en la tarde.
Sí, lugar que parece haberse confabulado con los calendarios. Ese lugar, Santilana de Mar, parece sacado de unos años lejanos.
EliminarGracias por comentar, Rafael. Un abrazo
Ay... esa enagua manchada clavada en el tiempo!!!
ResponderEliminarBesos.
La mente es tan caprichosa que es capaz de volver a unos instantes, seguramente a los que cambiaron las vidas. Luego la propia vida sigue le derrotero que quiere, ese sí.
EliminarUn beso
Amor, nostalgia, tristeza y conformismo bellamente combinados.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Macondo. La imagen proponía resignación ante una vida no deseaSugiera un aimagen del pasado, sin ganas ni necesidad de cambiar.
EliminarUn abrazo
Prosa teñida de poesía, un texto precioso inspirado en una imagen de piedra. Te debo muchos abrazos porque te leo siempre pero no te lo digo, leer es fácil pero escribir desde el móvil es un tormento.
ResponderEliminarTú tranquila. La tecnología va sensacional, pero esas teclas tan chicas del móvil, que acaban escribiendo lo que quieren, son una faena. Lo importante es leerse, leer, seguir compartiendo.
EliminarUn abrazo y disdruta
Dicen que darse por vencido es de cobardes o de flojos. Pero a veces es la solución más sensata. Besotes!!
ResponderEliminarLa evidencia en este caso era que el tiempo, las décadas habían pasado. El paisaje del pueblo era el mismo, y la buena mujer tenía que aceptar, ante el último latido, que su espera había sido en vano.
EliminarUn abrazote.
Triste, pero muy realista relato.
ResponderEliminarLas esperas al que se fue no pueden ser eternas. Entre seis meses y dos o tres años. Esperar más es languidecer en la no vida.
Tu relato es exquisito, aunque triste.
Enhorabuena
Un beso