Tomado de Google |
La virtuosa del violín y el solista de piano se dejaron llevar por los sonidos del vals, y salieron bailando de la Gran Sala. Solo existían ellos dos, la mano de él en la cintura de ella, la de ella rodeando su hombro, girando, ciegos de pasión. No se percataron de que habían alcanzado la barandilla de babor, ni de que el helado Atlántico Norte se alzaba a sus pies. Pudieron haber avisado del desastre, pero el ruido del iceberg, rajando el casco, fue interpretado por ambos como el chirrido típico de alguna de las prótesis de cadera. Ambos las portaban, desde hacía más de diez años.
Con el movimiento, rodaron enmarañados, entre brazos y piernas de otros pasajeros que también llegaban al mar gélido. Los gritos de socorro fueron los últimos sonidos que pudieron distinguir, pero en sus cabezas continuaba sonando la música de la orquesta, en ese vals que duraría por toda la eternidad .
Que imagen tan impactante ..desde luego tuvo que ser horrible ver como el agua penetraba en ese gran barco y ver que se hundía ..Un vals para la eternidad .
ResponderEliminarUn abrazo amiga ..feliz día.
En verdad tuvo que ser impactante. Nadie podía sospechar una botadura tan tremenda.
EliminarUn abrazo y feliz tarde
Como te lea James Cameron , te requiere como guionista.
ResponderEliminarBesos.
No creo :-), las parejas entradas en años no parecen buenas para ningún film de éxito.
EliminarUn abrazo, Juan L.
Me ha gustado tu blog
ResponderEliminarGracias por compartir,
te paso mi blog por si deseas griticarlo
https://anna-historias.blogspot.com/2019/04/suspirando-morir_11.html
Bjs
Bueno, hace tiempo que lo tengo, nueve años, pero llegar a él no era fácil, seguro
EliminarYa paso por tu blog, Anna. Un abrazo y por una tarde con buena música
Maldito vals y malditas prótesis de cadera, pero, ya se sabe, los sentimientos pueden más que los sentidos, jeje.
ResponderEliminarOriginal relato con un final no demasiado feliz. Pero fue bonito mientras duró, jajaja.
Un abrazo.
El fin no podía ser otro, pero es bonito pensar que la pareja entrada en años, pudiera gozar de esa música, de esa danza, prescindiendo de todos y de todos
EliminarUn abrazo y gracias. Una feliz tarde
en un libro de psicología que leí no hace mucho, ponían como ejemplo de temperamento flemático (el que aplica la racionalidad a todo y no se inmuta por nada) a los músicos del titanic. es curioso que todos a la vez reaccionaran con esa impasibilidad y continuaran tocando a pesar de que el barco se hundía...
ResponderEliminarabrazos!
Parece que, en efecto, la orquesta del Titanic seguía tocando, a pesar de que evacuaban el buque, con pocos botes salvavidas, todo se ha de decir. La flema de aquellos músicos, qué homenaje a ala serenidad
EliminarUn abrazo y feliz jueves
Es bonito sonreír al leer un tema tan apasionante.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz día.
Las prótesis hacen ruiditos. No creo que comparables a una fisura en un casco de buque, pero es que si no, el post perdía le sentido :-)
EliminarUn abrazo y gracias, Rafael
Cuando se sabe que no hay solución, que no hay salida, hay que tener mucha mente fría, mucho temple para quedarse hasta el final como si nada estuviera pasando.
ResponderEliminarUn beso.
Ellos, esa pareja de amantes mayores, seguían bailando, hasta desaparecer, entre gritos, con una melodía en la mente.
EliminarEl amor, siempre eterno mientras dura, a aveces es realmente eterno. Un abrazo
Un vals para la eternidad, nunca mejor dicho.
ResponderEliminarApasionante final, morir así...
Me ha encantado amiga
Felliz tarde Albada.
Cuando la edad depara la ocasión de bailar, cogido a quien se ama, qué mejor que morir bailando, con un vals en la memoria, por toda la eternidad
EliminarUn abrazo y gracias, Carmen. Feliz tarde
Nueva escena para la película y hasta puede que sea una historia jamás contada porque solo ellos la vivieron.
ResponderEliminarDesgraciado coloso del mar.
Feliz tarde.
Un coloso con pies de plomo, parece ser. Me alegro te haya gustado esa escena, que pudo ser, por qué no. No siempre los protagonistas han de ser jóvenes y guapos :-)
EliminarUn abrazo y feliz tarde de jueves, con sol y música
Para mí sería una muerte terrible, ahogado y en aguas gélidas, así debió ser para todos esos pasajeros, más aún si fue de esa manera tras una fiesta. Una tragedia sin duda.
ResponderEliminarUn beso dulce.
En la tragedia, esa pareja era un universo de vals en los brazos, un nido de amor con música en los zapatos, un destino gélido, que tal vez fue unan bendición.
EliminarUn abrazo y feliz tarde, Dulce
¿Quién está tan loco como para renunciar a un vals eterno? Sobre todo si la alternativa es hundirse en aguas heladas.
ResponderEliminarMe encanta tu imaginación
Un abrazo grande
Renunciar a ese vals eterno debe ser una bonita manera de irse, sobre todo a cierta edad
EliminarGracias, Alis. Un abrazo y por un viernes con buenas películas
Ese chirriar...que impidió pedirle al iceberg que se apartara un poquito, pero bueno les quedó un vals de lo más logrado.
ResponderEliminarUn beso.
Cachis, fue un chirrido pequeño, el iceberg no lo escuchó :-)
EliminarUn beso y buen finde
Malditas prótesis engañosas...
ResponderEliminarBueno, que sigan bailando hasta el fin de los tiempos.
Besos.
Mejor que sigan bailando sin hacer caso a los ruidos de los metales propios o ajenos
EliminarUn beso y buen finde
Morir bailando seguro que no hay mejor forma. Una gran película de la que es imposible la segunda parte, sería estupendo recuperar el vals. Abrazos
ResponderEliminarNo es mala manera, en absoluto, sin sufrir mucho ni hacer sufrir :-) Una peli preciosa e irrepetible
EliminarUn abrazo y por un finde bonito
La película me encantó, no sé las veces que la habré visto... pero esta versión te ha quedado de cine, preciosa.
ResponderEliminarMil besitos que te lleguen y feliz día ♥
Me alegro que te haya gustado. La peli es magnífica, no me extraña que la hayas visto mças de una vez
EliminarUn abrazo y por un fin de semana de película
El solista y la virtuosa eran dos desertores. Pero ya se sabe que la pasión conduce a la fatalidad. Eros y Tánatos en acción al compás del último vals. Take this waltz...
ResponderEliminarhttps://www.youtube.com/watch?v=jWMOqVKHeSQ
Eros y Tanatos, en el equilibrio perfecto al compás de ese último vals. Qué gusto volver a escuchar a Cohen en ese regalo de un baile, gracias
EliminarUn abrazo y por un fin de semana de bailes de salón en la mirada
Jajajajaja, el chirrido de las prótesis, ¡ya llegarás a esos años, jodía! jajajajaja.
ResponderEliminarSaludos.
Las he puesto muy ruidosas y no ha para tanto. ;-)
EliminarUn abrazo
Un baile de despedida, para la eternidad...
ResponderEliminarHermoso tu relato,y la imagen muy impactante!
Un beso.
Ese último vals no buscado, gozado como los primeros, sin duda, porque esa pareja merece una muerte juntos, bailando.
EliminarUn abrazo y gracias
C'est l'amour. Es capaz de obviar la tragedia para que no interrumpa un momento de pasión.
ResponderEliminarUn abrazo.
Quçe verdad, el amor que todo lo puede, que todo lo supera
EliminarUn abrazo y feliz viernes
Aferrarse al amor en su dulce melodía que cual nana adormecía la dura realidad de ese trágico momento…
ResponderEliminarQué buen relato. Hermoso y poético, aun sumido en la tragedia…
Un abrazo grande, y muy feliz noche, querida amiga 💙
Qué mejor modo de isres, que arrullado en los brazos de quien se eama, y con la melodía de la pareja preferida.
EliminarGracias, Alis. Un abrazo y feliz finde
Un vals eterno en tan bello texto. No importa nada cuando es amor verdadero......Saludos y abrazo.
ResponderEliminarNada importa, es verdad, ese seguri bailando, por toda la eternidad, como fuente de la mejor despedida, cuando se ha amado
EliminarUn abrazo y por un viernes feliz y pleno
Eso es amor... con prótesis incluidas.
ResponderEliminarAbrazos
Lo es, seguro, aun con prótesis, son dos seres que se aman
EliminarUn abrazo
Hola Aldaba, vengo de un blog amigo y me he puesto a pasear un poquito por el tuyo. Me gustan tus publicaciones, es agradable leerlas y entretienen, asi que me quedo por aquí. Yo estoy en https://elbaulderita.blogspot.com/, por si me quieres visitar.
ResponderEliminarUn abrazo amigo
Me alegro te gusten. He pasado por tu blog y también me ha sido muy grato, así que nos leemos
EliminarUn abrazo y feliz tarde de viernes
Qué bella manera de dejar este mundo, aturdidos por el amor y la música.
ResponderEliminarAturdidos de amor, qué mejor manera, ya te digo. Los valses eternos dando fe de ese amor sin fecha de caducidad
EliminarUn abrazo y feliz finde
Pues ojalá podamos elegir ese final tan dulce, a pesar del frío
ResponderEliminarUn abrazo Julio David